El petróleo de Texas (WTI) cayó hoy 1,62 % y cerró en u$s 59,95 el barril, con lo que quebró la barrera de los u$s 60 por primera vez en cinco años, un día después de desplomarse más de un 4,5%.
El crudo de referencia en Estados Unidos se ha depreciado en lo que va de semana casi un 9 % y continúa bajo presión por un exceso de oferta de los principales exportadores y su incapacidad de ponerse de acuerdo para recortar la producción.
De esta manera continúa en caída libre pese a que durante la jornada se conocieron varios indicadores económicos mejores de lo previsto sobre el mercado laboral, las ventas minoristas y el gasto de los consumidores en Estados Unidos.
La peticiones del subsidio por desempleo bajaron la semana pasada en 3.000 y se situaron en 294.000, por debajo de lo que esperaban los analistas, mientras que las ventas minoristas subieron ese mismo mes un 0,7 %.
El precio del crudo de Texas está muy por debajo del máximo anual de los u$s 102 alcanzado a fines de junio. Comenzó a caer desde entonces, en un descenso que se agudizó a fines de septiembre pasado, por un exceso de oferta de los principales exportadores.
El descenso fue aún mayor después de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) decidiera el pasado 27 de noviembre mantener los actuales niveles de producción, en torno a los 30 millones de barriles diarios.