Las tensiones sociales y el aumento en el extremismo político podrían elevarse a niveles peligrosos a menos que los dirigentes europeos decidan hacer frente al tema del creciente desempleo, advirtió el funcionario de más alto nivel del área de la Unión Europea.
Vladimir Spidla, comisionado para Asuntos Sociales, dijo que la nueva oleada de jóvenes que dejan el colegio con pocas perspectivas laborales plantea una “amenaza latente para el orden social europeo.
Sus comentarios anticipan en unos días lo que se preveía iba a ser una “cumbre del empleo de alto perfil, en la que participarían los mandatarios de los 27 miembros de la UE. Sin embargo, la categoría de este encuentro ha sido silenciosamente disminuida en las últimas semanas porque los políticos se muestran poco dispuestos a darle una dosis importante de poder a Bruselas en materia de políticas sociales.
Eran pocos los líderes nacionales que querían quedar asociados a la idea de una cumbre especial sobre puestos de trabajo en un momento en que el desempleo sigue en auge, señalaron fuentes diplomáticas.
Pese a esto, Spidla le dijo al Financial Times que Europa tiene que concentrarse en el aspecto social de la crisis financiera si quiere evitar un incremento en los enfrentamientos.
“Si uno está en una situación en la que mucha gente queda excluida del trabajo, es obvio que esto creará tensiones sociales. Las consecuencias pueden ser limitadas, pero también podrían resultar peligrosas. Todos vimos lo que pasó en los suburbios franceses y también hemos visto el auge del extremismo en Europa central y en otras partes , comentó Spidla.
Se considera que el desempleo y la falta de oportunidades para los hijos de inmigrantes contribuyeron a los tumultos que se vivieron en Francia en 2005. En esa ocasión se declaró estado de emergencia después de que alrededor de 8.000 vehículos ardieran durante tres semanas.
Spidla responsabilizó al “populismo político, los discursos que fomentan el odio y las exageraciones de la prensa por lo que se percibe como un aumento en los ataques a miembros de la comunidad gitana en Hungría y la República Checa, entre otros países.
Según él, la situación empeorará en los próximos meses, a medida que una nueva camada de jóvenes se gradúe y empiece a buscar trabajo. “La cantidad de gente que termina sus estudios no cambiará, mientras que la capacidad del mercado laboral de darles empleo si se modificará , agregó el comisionado europeo.
Spidla, que es uno de los miembros de tendencia más izquierdista de la Comisión, dijo que la crisis ha puesto en evidencia la importancia de la “Europa social , un concepto que prácticamente se había descartado cuando entró en funciones la Comisión actual, hace cinco años.
Los preparativos ya están en marcha para la reunión sobre el empleo que se realizará en Praga el jueves próximo y se ha decidido acortarla a una sesión de mañana que precederá a otros encuentros sobre temas europeos. La reunión quedó reducida a un encuentro mucho más convencional entre políticos de Bruselas, sindicalistas y representantes de entidades empresarias, y es probable que atraiga poca publicidad.
La reducción en la importancia de la cumbre fue considerada un desaire por los sindicatos, que habían esperado usar el foco de atención para impulsar su agenda pro “Europa social .
Spidla insistió en que “el formato diplomático de la reunión puede haber cambiado, pero no su ambición .