Pese a que la reciente batería de datos macroeconómicos positivos publicados (sobre todo en Asia) refleja un repunte de la actividad económica y mejora la confianza; los precios de las materias primas no terminan de arrancar. Esto es el reflejo de la confrontación entre factores macro y microeconómicos: por un lado gran parte de las buenas noticias ya se han descontado, y por el otro, los equilibrios entre oferta y demanda de las materias primas individuales no son favorables. Los commodities están tocando el límite de crecimiento, y los datos recientes son más un soplo de aliento, que un llamamiento en firme a una elevación de precios respaldada por la recuperación de la demanda, según destaca Sala de Inversión.
El prisma a través de la cual se ha mirado a los metales básicos a lo largo del año ha tenido un tinte claramente bajista. De acuerdo con Barclays, este grupo se enfrenta actualmente a una situación de oferta positiva que está impulsando los excedentes al tiempo que presiona los precios. Con esta perspectiva en mente, es fácil entender por qué los participantes del mercado mantuvieron una visión escéptica hacia el metal que realmente ofrece una historia fundamental alcista en 2013: el plomo.
El banco británico señala que la balanza de riesgos apunta hacia la actual escasez de existencias en este mercado que se extendería hasta 2014, llevando al plomo a sobrepasar al resto del grupo de metales industriales.
Las causas del déficit serían: la limitada extracción del metal y oferta de plomo refinado excluyendo a China, así como una contracción del 2% en la producción minera del gigante asiático.
Cualquier movimiento de precio por debajo de 2,100 dólares/tonelada en el London Metal Exchange sería percibido como una oportunidad de compra, considerando que la estimación para los próximos 12 meses es de alza hasta promediar 2,350 dólares/tonelada para el cuarto trimestre de 2014, de acuerdo con Barclays.
Sus múltiples aplicaciones entre las que se incluye la fabricación de baterías, forros para cables, elementos de construcción, soldaduras, pigmentos, etc, avalan el argumento alcista para este activo; aunque el temor a una desaceleración de la demanda china en los próximos tres años debido - según la firma estatal Antaike - a una maduración del sector automotriz y de bicicletas eléctricas, y la estabilización de las compras de la construcción, ha empañado el desempeño del commodity desde 2011.
El Grupo Internacional de Estudio sobre el Plomo y el Zinc (ILZSG, por su sigla en inglés) apuesta desde el mes de mayo por un aumento de la demanda global de 4,8% a 11.09 millones de toneladas de plomo.
Por otra parte, el análisis de Sucden Financial, establece que oferta y demanda crecerán a una tasa similar este año en torno al 6%, manteniendo al mercado en equilibrio.
Si bien el análisis técnico a largo plazo muestra que la cotización del plomo está atrapada en un rango lateral que desde finales de 2011 se ha ejecutado entre 2,500 y 1,770 dólares por tonelada, considerando los fundamentales actuales, el riesgo de precios es alcista, además de contar con un mayor interés inversor.
Teniendo en cuenta las perspectivas económicas de China y EE.UU., la recuperación de la industria automotriz en estas regiones y el aumento mundial de la demanda de baterías industriales, la demanda de plomo será relativamente fuerte este año. Y es que, la demanda de baterías para el despliegue de la telefonía móvil 4G es el resultado directo de los avances tecnológicos, y por tanto mucho menos dependiente del crecimiento económico.