En las próximas semanas, algunos autos Volvo comenzarán una travesía histórica desde el sudoeste de China hasta Estados Unidos. Los sedanes S60L de la compañía sueca serán transportados en camión hacia el puerto de Shanghai, cargados en buques portacoches que cruzarán el Pacífico y finalmente, desembarcados en Los Angeles.
Fabricados en la nueva planta Volvo en Chegdu, los primeros autos para pasajeros made in China y producidos sólo para ser exportados a EE.UU. son un recordatorio de hasta donde llegó el país tal como hicieron antes Japón y Corea del Sur en términos industriales globales.
China pasó de ser un proveedor de productos de bajos costos y que requieren mucha mano de obra para convertirse un exportador de lo que Ralf Speth, CEO de Jaguar Land Rover, describe como "el producto de consumo masivo más complejo de la tierra".
"China probablemente siga el camino que vimos con Japón y Corea, pero lo hará más rápido", aseguró esta semana Hakan Samuelsson, CEO de Volvo, durante la Auto Shanghai, una de las dos exposiciones de autos anuales que se realizan en China. "Diría que es realista pensar que en 2020 veremos autos chinos en el mercado global".
A diferencia de Volvo, que pertenece a la automotriz china Geely, los ejecutivos de automotrices multinacionales mayormente se muestran reacios a hablar de China como una posible plataforma de exportaciones para sus productos.
Eso se debe en parte a que no quieren competir contra unidades del mismo grupo en el exterior y además tener que compartir los ingresos por exportaciones con su socio de un joint venture en China. Según las regulaciones del gobierno chino, los extranjeros pueden ser dueños de hasta el 50% de las fabricas de autos.
Pero dado que las inmensas inversiones en capacidad están entrando en funcionamiento justo ahora que el crecimiento económico anual cae a una "nueva normalidad" inferior a 7%, la pregunta sobre si esa capacidad debería usarse para exportaciones no desaparece.
Jacques Daniel, director de negocios en China en Renault, señaló que sus pares del exterior mencionan el tema de las exportaciones con frecuencia. "La pregunta la hacen nuestros colegas en Renault mismo porque temen que empecemos a exportar", contó Daniel. "Pero con un mercado tan grande acá, toda nuestra energía debería estar concentrada en China".
