Las automotrices de muy alta gama están invirtiendo en India. El país, que alberga casi 500 millones de los ciudadanos más pobres del mundo y, al mismo tiempo, al mayor grupo nacional de millonarios no estadounidenses, se convirtió en el próximo mercado clave para los autos deportivos más caros.
Aston Martin, el fabricante británico de vehículos de lujo y alto rendimiento, fue el último en anunciar su ingreso al segmento indio de esos codiciados autos, lo que indica que el clan de habitantes muy adinerados ya es demasiado grande como para ignorarlo.
Creemos que el mercado alcanzó la masa crítica necesaria para que las concesionarias locales sean financieramente viables, comentó Bill Donnelly, director global de Aston Martin.
Aston Martin se unió a Ferrari, Maserati y Bugatti, que también anunciaron planes de abrir un showroom en India, donde el año pasado había cerca de 130.000 millonarios. Al mismo tiempo, se estima que el 80% de la población vive con menos de u$s 2 diarios, según el Banco Mundial.
En India se vendieron 15.702 autos de alta gama el año pasado, mucho menos que los 727.227 vehículos lujosos que compraron los chinos en el mismo período, según datos de IHS Global Insight.
India cuenta con una deficiente red de autopistas y grava con un impuesto de 110% a los vehículos importados.
