La estrategia de salir de Latinoamérica - con la excepción de Brasil -, que marcó Marc Murtra al asumir la presidencia de Telefónica, se está cumpliendo a pasos acelerados.
Anoche, la compañía comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el acuerdo alcanzado para la venta de la totalidad de sus acciones en Telefónica Móviles del Uruguay a Millicom Spain, por valor de 440 millones de dólares estadounidenses, que al cambio actual representan unos 389 millones de euros, representativas del 100% de su capital social.
En el hecho relevante enviado a la autoridad regulatoria, la segunda operadora de España aclara que con esta operación, que está a la espera de determinadas condiciones de cierre, incluyendo la aprobación de las autorizaciones regulatorias correspondientes, "Telefónica avanza en su plan de reducir la exposición en Hispanoamérica".
Así, la venta de la filial uruguaya que usa comercialmente la marca Movistar se suma a las desinversiones en Colombia, Argentina y Perú.
Los analistas coinciden en señalar que Millicom Spain no encontrará serias resistencias para hacerse con los correspondientes permisos regulatorios ya que no opera en Uruguay. Por otra parte, Millicom Spain y Telefónica ya saben lo que es hacer negocios juntos.
La compañía de origen sueco, cuyo accionista principal es el empresario francés Xavier Niel, pagó a Telefónica Colombia 367 millones de euros por el 67,5% de las acciones de los españoles en la teleco, cuya propiedad comparte con el Estado colombiano y otros inversores, que atesoran el 32,5% restante, porcentaje por el que también mostró interés el comprador y por el que ofreció el mismo precio por acción pagado a Telefónica.
Por cierto, la venta de Telefónica Colombia aún no consiguió la luz verde del órgano regulador.
En tanto, Movistar Uruguay es el segundo operador móvil del país con cerca del 29% de los accesos a marzo del 2025, muy por detrás de la estatal Antel, y seguida por Claro, del magnate mexicano Carlos Slim, principal rival de la empresa española mientras mantenía a la región como uno de sus destinos claves en su política de expansión internacional.
También conviene destacar que Telefónica en Uruguay cuenta con una cobertura que alcanza el 97% del territorio, lo que le permite presumir de un importante volumen de clientes 4G. Por otra parte, la teleco tiene licencias en las bandas de 850 MHz, que les permiten ofrecer servicios de telefonía 2G y 3G, así como espectro en la banda de 700 MHz y 1900 MHz, para conectividad de 4G y 5G.
La cartera de negocios de Movistar Uruguay incluye, además, servicios para el mercado de empresas, gracias una red de más de 70 tiendas propias y agentes, así como con 1300 colaboradores directos e indirectos y más de 5000 proveedores y socios estratégicos.
La posición de Millicom
La compañía, cuya presencia en América Latina sólo se remitía a Bolivia y Paraguay, emitió un comunicado en el que expresa que esta operación le permite consolidar su posición de liderazgo en la región.
También, de acuerdo a sus proyecciones, la operadora estima que la compra de la filial uruguaya de Telefónica tendrá un impacto positivo en el flujo de caja libre para los accionistas (EFCF) desde 2026, impulsado por eficiencias operativas y la integración con su presencia regional actual.
"El panorama de mercado en Uruguay es positivo, respaldado por un entorno regulatorio estable y sólidos fundamentos del mercado móvil, lo que brinda una base sólida para un crecimiento sostenible", afirma la empresa en el comunicado.
Millicom Spain destaca que se trata de la adquisición de un operador móvil rentable y consolidado con cobertura nacional en Uruguay, con sinergias operativas y comerciales con las operaciones existentes de Millicom en Paraguay y Bolivia, el fortalecimiento del ecosistema digital, "permitiendo mayores oportunidades de empaquetamiento e innovación en servicios".
Para Marcelo Benítez, CEO de Millicom, esta adquisición representa un hito clave en la estrategia de crecimiento de la compañía en América Latina, "especialmente en Uruguay, un país con sólidos fundamentos y una agenda digital con visión de futuro. Estamos comprometidos a ser un socio a largo plazo en el desarrollo digital de Uruguay mediante la inversión en infraestructura móvil, la mejora de la calidad del servicio y el fomento de la innovación y el desarrollo del talento".
El lastre que representó para los resultados del Grupo Telefónica las operaciones en Argentina y Perú se explica por las minusvalías contables de estas dos filiales que alcanzaron 1731 millones de euros en el primer trimestre de este ejercicio, y que ocasionaron unas pérdidas netas de 1304 millones.
Telefónica Brasil, en cambio, logró crecimientos interanuales en las principales áreas de negocio de enero a marzo de este año, hecho que elevó el beneficio en un 18%, hasta los 1100 millones de reales, cifra que en euros representa 168 millones. Los ingresos también mostraron una flecha ascendente hasta alcanzar un 6,2% más, con ventas de 14.400 millones de reales, esto es 2285 millones de euros.
Más datos. La filial brasileña creció un 10,3% en la captación de clientes de mayor valor de contrato móvil, alcanzando los 67,4 millones de abonados. Tampoco la fibra óptica se quedó atrás. En este caso, hablamos de un incremento del 10,6%, con 29,6 millones de hogares suscritos.
En tanto, la generación de caja obtuvo un incremento operativo del 12,7%, hasta alcanzar los 3800 millones de reales, unos 603 millones de euros. Mientras el Ebitda creció un 8,1%, con 5700 millones de reales (904 millones de euros), el margen de rentabilidad alcanza el 39,6%.
Estos números explican, en parte, el interés de Telefónica de profundizar su presencia en el gigante sudamericano. Dentro de esa lógica puede inscribirse el interés por tomar el control en FiBrasil, la sociedad de infraestructuras y servicios de fibra óptica que comparte a partes iguales con el fondo Caisse de dépôt et placement du Québec (CDPQ).
En caso se llevarse a cabo esa operación, los 1800 millones de reales (280 millones de euros) invertidos por CDPQ hace cuatro años sirven como referencia a la hora de cotizar el 50% en poder de los canadienses.
La compañía de fibra facturó en 2024 unos 498,9 millones de reales (78 millones de euros al cambio), lo que explica un 36,2% más que el ejercicio 2024. Otro dato no menos relevante: La cuarta parte de estos ingresos proceden de Telefónica Brasil. Todo cierra.