

En su más reciente obra, "La Armada Invencible", el reconocido escritor mexicano Antonio Ortuño ha logrado fusionar dos de sus grandes pasiones: la literatura y la música.
La novela narra la historia de un grupo de hombres en la cuarentena que anhelan revivir su banda de heavy metal, la cual fracasó en su juventud. Enfrentando la crisis de la mediana edad, intentan resucitar su sueño musical.
En una entrevista concedida a BBC Mundo, el autor mexicano confiesa que ha postergado la escritura de esta novela durante varios años.

La música como base para el desarrollo
Ortuño, un ferviente admirador de bandas legendarias como Metallica, The Clash y Black Sabbath, ha manifestado que la música ha constituido un componente fundamental de su existencia, casi al mismo nivel que la escritura.
En "La Armada Invencible", la narrativa se estructura en dos secciones, rindiendo homenaje a los formatos musicales tradicionales, con capítulos titulados en honor a canciones icónicas del género, tales como "Jump in the Fire" de Metallica y "Never Say Die" de Black Sabbath.
La historia refleja los dilemas universales de la vida adulta: la nostalgia, los sueños frustrados y la melancolía. No obstante, Ortuño refuta la idea de que su novela sea sombría; la describe más bien como "carnavalesca", donde los personajes se esfuerzan por revertir las decisiones del pasado.
Esta búsqueda no es exclusiva de aquellos que anhelan revivir una banda, sino que resuena con individuos que, al alcanzar cierta edad, intentan recuperar su juventud de otras maneras, como regresar al parque tras décadas para ejercitarse.
"Las personas que se aventuran a hacer ejercicio en el parque después de 30 años no son tan diferentes de quienes desean revivir a su banda de heavy metal", comenta en tono humorístico el autor.

Heavy metal: un refugio de identidad y resistencia
"El metal no representa únicamente la estética de los perdedores, sino que también se erige como la música de las almas desgarradas", reconoce Ortuño, quien argumenta que este género musical ha servido como un refugio en los momentos más adversos de su existencia.
"El metal aborda una variedad de temas, entre los cuales se encuentran el malestar y la sensación de desasosiego con el entorno, las tragedias personales, así como las enfermedadesmentales, cuestiones que, de manera repentina, el pop parece descubrir".
La fidelidad hacia el heavy metal es innegable, dado que numerosos metaleros continúan portando las mismas camisetas y peinados que lucían en su juventud. La identidad que se forja en torno a este género es tan intensa que, a pesar de ser minoritaria, ha perdurado a lo largo de más de cinco décadas.












