Con el objetivo de optimizar el tráfico y mejorar la seguridad vial en España, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha desplegado una serie de medidas, tales como reglas de tránsito o controles vehiculares.
En ese sentido, uno de los factores esenciales de estos cambios se centra en la renovación de las señales de tráfico.
Desde la DGT han anunciado una nueva señalización que entró en vigor el pasado 1 de julio y puede empezar a observarse en las carreteras. Asimismo, su incumplimiento puede derivar en graves multas.
DGT: cuál es la nueva señalización y para qué sirve
Se trata de la nueva señal 2+1, que forma parte del Reglamento General de Circulación (RGC), y su función es regular la velocidad de los vehículos y reducir el riesgo de accidentes.
A su vez, resulta especialmente práctica en carreteras convencionales de doble sentido, donde los adelantamientos presentan mayor riesgo. En ese contexto, la nueva indicación vial 2+1 advierte la llegada a un tramo con tres carriles, donde el central se destina de forma alterna a los adelantamientos en ambos sentidos.
Para utilizarlo, los conductores deben cumplir las normas fijadas por la DGT:
- Señalizar la maniobra con antelación
- Comprobar que la vía esté libre
- Respetar los límites de velocidad del tramo.
La nueva señal 2+1: cuál es su objetivo
Estas carreteras han sido concebidas con el objetivo de reforzar la seguridad vial. Según destaca la DGT, su principal aporte es ordenar los adelantamientos y organizar la circulación.
Al contar con un carril central exclusivo para adelantar de forma alterna en ambos sentidos, se reduce notablemente el riesgo de colisiones frontales o laterales.
Además, este diseño favorece la fluidez del tráfico, ya que los vehículos más rápidos pueden rebasar a los más lentos sin interferir con el sentido contrario.
Nueva señal 2+1: multas de hasta 200 euros por incumplirla
El uso incorrecto del carril central alterno se considera una infracción grave. Las sanciones por incumplimiento pueden llegar a los 200 euros y, además, conllevan la retirada de hasta 4 puntos del permiso de conducir.
Estas medidas no solo buscan castigar el comportamiento peligroso, sino también reforzar la educación vial y la responsabilidad al volante.