En este contexto, el ministerio liderado por Margarita Robles está evaluando la adquisición del modelo F-35 Lightning II, un avión fabricado por la empresa estadounidense Lockheed Martin, especializada en la industria aeroespacial y de defensa.
El Ministerio de Defensa aún no ha confirmado los reemplazos a los aviones Harrier AV-8B+ que actualmente emplea la Armada. Según se ha explicado desde esa cartera del Gobierno, la vida útil de estos cazas estaría cercana a alcanzarse.
Sin embargo, aún no hay una confirmación de parte de Defensa sobre cuándo se efectuará la compra de los cazas que reemplazarán a los Harrier.
Todo lo que sabemos sobre los aviones F-35 que Defensa planea adquirir
En el mes de febrero, el portal especializado InfoDefensa reportó que dos medios de comunicación internacionales habían reavivado el debate en torno a la adquisición de los F-35 de quinta generación.
En la Revista de Aeronáutica y Astronáutica, publicada por el Ejército del Aire y del Espacio (EA) en su edición de enero y febrero, se subrayó el creciente interés por este avión. Simultáneamente, el medio internacional Janes llevó a cabo un análisis sobre la posible adquisición de 25 unidades del modelo F-35A y otras 25 del modelo F-35B.
"España podría haber renovado su interés en la compra del caza de quinta generación, Lockheed Martin F35 Lightning II, como un posible reemplazo parcial de sus actuales aviones Boeing EF18 Hornet y McDonnell Douglas AV-8B Harrier II", afirmó la revista del EA, citando fragmentos del artículo titulado "Resumen de la aviación militar en 2023", publicado por el Ministerio de Defensa.
Características de los cazas F-35 que planea adquirir Defensa
El F-35 Lightning II es un avión de combate polivalente de alta tecnología, desarrollado por Lockheed Martin, principalmente para el ejército de Estados Unidos, aunque su uso se ha extendido a diversas naciones alrededor del mundo.
Se presenta en tres variantes principales: el F-35A, que es una versión de despegue y aterrizaje convencional destinada a las Fuerzas Aéreas; el F-35B, diseñado para despegues cortos y aterrizajes verticales, lo que lo hace idóneo para el Cuerpo de Marines y la Marina Real del Reino Unido; y el F-35C, que es una variante optimizada para operaciones desde portaaviones, adaptada para la Marina de los Estados Unidos.
El F-35 es reconocido por sus capacidades furtivas, diseñadas para eludir la detección de radares enemigos, lo que lo convierte en un activo esencial en la guerra aérea contemporánea. Integra sistemas de sensores avanzados que ofrecen una visión integral del campo de batalla, permitiendo una conciencia situacional superior.
El diseño de la aeronave enfatiza la flexibilidad multirol, lo que le permite llevar a cabo misiones de combate aire-aire, ataques aire-tierra, así como operaciones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento.
En términos de armamento, el F-35 está preparado para transportar una amplia gama de armas, incluyendo el cañón GAU-22/A de 25 mm, misiles aire-aire AIM-120C y GBU-31 JDAM para ataques a objetivos terrestres. Su sistema de propulsión le permite alcanzar velocidades de hasta Mach 1,6, con un alcance considerable, lo que mejora su eficacia en diversos escenarios de combate.
¿Cuándo adquirirá Defensa los nuevos cazas F-35?
De acuerdo con la Armada, la compra del F-35 es "ineludible" y el Ministerio de Defensa está evaluando la opción de fabricar algunos componentes del avión en el país.
Esta iniciativa busca asegurar que una parte de la inversión beneficie directamente a la economía española. Al incorporar elementos de producción nacional en el proceso de compra, el ministerio aspira a fortalecer la industria local y obtener ventajas económicas de este significativo gasto militar.
En abril de 2024, Carlos Delgado, analista y consultor en temas de defensa, declaró en una entrevista a Infobae: "El volumen de compra que prevé España no es lo suficientemente atractivo para la industria estadounidense como para incentivar algún tipo de producción en España".
Al respecto, comentó: "Si no se reemplaza el Harrier, la Armada perderá la capacidad de contar con un avión de ala fija embarcado y recuperar esa capacidad perdida resulta infinitamente más costoso que adquirir el F-35. Esto implica la formación de pilotos, la compra de aeronaves, mecánicos, instalaciones, logística, transporte, entre otros."