Durante la excavación neolítica de Karahantepe, en el sureste de Turquía, fue hallada una vasija de piedra con tres figuras de animales en su interior. Según el arqueólogo turco Necmi Karul, la pieza, de al menos 10.000 años de antigüedad, puede ser el ejemplo más antiguo de una historia contada a través de símbolos, un antepasado de la escritura.
Karahantepe es un asentamiento neolítico fechado entre 9500 y 8000 a.C., perteneciente a una cultura de cazadores y recolectores. Esta facción aún no conocía ni la cerámica ni la agricultura, pero ya poseía altas capacidades artesanales y artísticas.
El hallazgo fue realizado el año pasado, y desde el presente mes está exhibido por primera vez al público en la Biblioteca Nacional de Ankara. Es el primer ejemplo de esculturas encontradas en su contexto original de creación, según explica Karul a EFE.
Las figuritas talladas en piedra, de apenas 3,5 centímetros de largo, representan un jabalí, un buitre y un zorro, y "pese a su pequeño tamaño están muy bien ejecutadas, con los detalles anatómicos marcados", describe el arqueólogo.
El hallazgo fundamental para reescribir la historia de la comunicación
"Podemos decir que esto es el antepasado de la escritura. No es escritura aún, no son signos, pero sí es el precursor de los pictogramas porque son piezas simbólicas colocadas en un orden determinado, contando una historia que se puede leer", enfatiza el experto.
Las piezas se hallaban dentro de una vasija de piedra, que también contenía tierra roja y tres piedras redondas horadadas, con la cabeza de cada animal colocada en el agujero, una composición intencionada, que, según Karul, quiso transmitir con certeza una "narración".
"Esto cuenta una historia. Supone una memoria colectiva: quienes la veían, sabían la historia que había detrás. Para nosotros es difícil interpretarla, pero podemos pensar que el anillo de piedra representa un umbral, un paso de un espacio a otro", explica el científico.
En Karahantepe abundan altorrelieves y grabados de zorros, buitres, jabalíes y otros animales, y también se han encontrado esculturas tridimensionales de jabalíes y buitres. Sin embargo, esta vasija de piedra es el primer hallazgo de unas piezas en su contexto claramente original, infiere el arqueólogo.
Las futuras investigaciones y teorías desprendidas del sorprendente descubrimiento arqueológico
Karul ha coordinado investigaciones en Göbeklitepe y desde 2021 dirige las excavaciones de Karahantepe, una colina situada a 45 kilómetros al este de la ciudad de Sanliurfa. Este es, posiblemente, el asentamiento humano estable más antiguo encontrado hasta ahora.
El experto corrige la expandida idea de que las construcciones fuesen únicamente santuarios e insiste en que en Karahantepe se puede perfectamente documentar un asentamiento humano estable de 15-20 viviendas alrededor de un gran edificio central. Algunos de estos monolitos, de varios metros de altura, estaban coronados por esculturas de animales.
Sin embargo, Karul no define este edificio central como un "templo" y asegura que era "multifuncional" y servía a diversas reuniones sociales. Allí podían desenvolverse eventos como actividades de música y no solo rituales religiosos.
El arqueólogo quiere proponer la vasija con las tres figuritas como candidato a entrar en la lista de la Memoria del Mundo de la Unesco, por su valor como concepto narrativo que en su época pudo ser "leído".
Fuente: EFE