En los últimos meses, la tasa de personas desempleadas se ha reducido en España. De esta manera, El empleo superó un nuevo techo en julio, con 21.865.503 personas trabajando de media afiliadas a la Seguridad Social. Por el lado del paro, se registra un descenso reducido, en 1.300 personas, el segundo peor dato desde 2008, hasta dejar un total de 2.404.606 personas desempleadas apuntadas a las oficinas públicas de empleo.
En este marco, el Gobierno tiene el objetivo concreto de facilitar la inserción laboral y ayudar a las personas que se encuentran desempleadas. Debido a las dificultades económicas que estos hogares puedan atravesar, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) pone a disposición distintos subsidios que pueden alivianar la situación.
En noviembre del año pasado entró en vigor el Real Decreto-Ley 2/2024. Esta sanción introdujo una reforma clave en el sistema de subsidios por desempleo al mejorar la cobertura para aquellos que han agotado el paro o que no han cotizado lo suficiente para acceder a la prestación contributiva.
Las cuantías del subsidio por desempleo del SEPE
El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ha comunicado que las cuantías del subsidio por desempleo se incrementaron a partir del 1 de noviembre. Este subsidio se determina en función del IPREM (Indicador Público de Rentas de Efectos Múltiples), lo que implica que durante los primeros seis meses los beneficiarios recibirán el 95% de este índice, es decir, 570 euros mensuales.
A partir del séptimo mes, la ayuda se reducirá al 90% del IPREM (540 euros) y en los meses subsiguientes será del 80%, quedando en 480 euros. Este nuevo esquema no se aplicará de manera retroactiva, por lo que los beneficiarios actuales no experimentarán modificaciones en sus ayudas.
No obstante, los nuevos solicitantes sí podrán beneficiarse de este aumento, lo que representa una mejora considerable para muchos desempleados que dependen de estas ayudas para subsistir en momentos de dificultad.
Quiénes podrán beneficiarse del subsidio por desempleo
Una de las principales novedades es la ampliación de los colectivos elegibles para acceder a estas ayudas. Anteriormente, los individuos menores de 45 años sin cargas familiares y los trabajadores eventuales del sector agrario no podían beneficiarse de estos subsidios.
Con la reciente reforma, estas limitaciones han sido eliminadas, lo que permite que un mayor número de personas acceda a las ayudas. Asimismo, los trabajadores transfronterizos y los españoles emigrantes retornados también serán incorporados en este nuevo marco de apoyo.
Por otro lado, las víctimas de violencia de género experimentarán mejoras en sus subsidios, ya que ahora contarán con una ayuda específica que les permitirá continuar recibiendo protección financiera, un aspecto que anteriormente no estaba contemplado en el sistema.