El presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, reconoció que el resultado del domingo “no fue el esperado” por el kirchnerismo. Pero, a diferencia de otros dirigentes del mismo espacio –como el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, el gran derrotado al perder en Buenos Aires y quien denunció supuestas traiciones internas- cree que “no es bueno buscar responsabilidades” dentro del FPV, que debería trabajar para “escuchar al pueblo” y “construir nuevas mayorías”.

“No es bueno es buscar responsabilidades entre nosotros (…) Hay que tener el oído puesto en el pueblo y escuchar sus expectativas. Lo demás me parece una pérdida de tiempo que no conduce a ningún lado”, resumió en declaraciones a radio Del Plata el ex ministro de Agricultura y hoy “candidato” a ministro de un eventual gabinete nacional de Daniel Scioli.

“Lo que había que hacer por el bien del país lo hemos hecho. En mi ciudad, Aníbal Fernández sacó más votos que la media provincial”, consignó el diputado oriundo de Chacabuco, que había sido derrotado por el jefe de Gabinete en las PASO a gobernador de Buenos Aires.

En una línea que ya ensayaron algunos de los dirigentes del FPV que sí ganaron, Domínguez resaltó también que “los pueblos son los que eligen”, y “no los dirigentes”. Y reconoció que la candidata del frente Cambiemos y hoy gobernadora electa, María Eugenia Vidal, “tuvo más visibilidad”.

Como Scioli, Domínguez subrayó que el FPV “ganó” en los comicios del 25 de octubre, pero reconoció que “no fue con el resultado esperado”.

En una frase que pareció apuntar a rechazar los supuestos problemas internos en el kirchnerismo, recordó que la presidenta Cristina Kirchner fue “el puente que permitió que Scioli fuera el candidato a presidente del FPV”.

“Ahora nos corresponde trabajar de cara al 22 de noviembre para que las puertas del futuro las abra Scioli y no Macri (…) Hoy está en juego el destino del pueblo y el bienestar de nuestra gente”, exhortó.