En medio de la renovada carga del Gobierno contra Alberto Nisman, fallecido de un balazo en circunstancias poco claras días después de que denunciara a la presidenta Cristina Kirchner, una agencia de noticias que depende del Ministerio de Justicia publicó que el fiscal estaba alcoholizado al momento de su muerte.
Según el sitio Infojus, una agencia de noticias que depende del Ministerio que encabeza Julio Alak, “la noche antes de morir, Alberto Nisman consumió una gran cantidad de alcohol”.
Según la agencia, “el informe toxicológico practicado por el Cuerpo Médico Forense determinó que el fiscal federal a cargo de la causa UFI AMIA tenía 1,73 gramos de alcohol por litro de sangre, que equivale a un estado de embriaguez elevado”.
El sitio del Ministerio de Justicia dice además que, según publicó el domingo el diario Página 12 el domingo y confirmó luego a Infojus “una fuente con acceso al expediente”, en el departamento de Nisman los investigadores “secuestraron una botella de vodka importado ‘abierta y a medio consumir’”.
El sitio además cita, vía Página 12, una exposición del criminólogo Raúl Torre en la que el especialista “explicó que es común que los suicidas consuman elevadas cantidades de alcohol antes de quitarse la vida” porque “ayuda a eliminar los frenos inhibitorios. En palabras llanas, ayuda a darse valor”.