La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) emitió una clara advertencia a los gobiernos de la región, instando a la diversificación comercial y la profundización de la integración regional como respuesta al “fuerte giro” que provocó Donald Trump a nivel global.
En este escenario de incertidumbre y de “cambios profundos” que se intensificarán el próximo año, el informe Perspectivas del Comercio Internacional de América Latina y el Caribe 2025 sitúa a la Argentina en un rol dual: como motor agrícola del MERCOSUR y como una economía con una baja exposición directa al mercado estadounidense.
Si bien se proyecta crecimiento de las exportaciones, por la baja de precios internacionales que afectará las ventas del sector energético, Argentina crecerá 4% en 2025, un punto porcentual por debajo del promedio regional.
Según las proyecciones las exportaciones más dinámicas serán las manufacturas y las del agro con alzas de7 y 5 por ciento respectivamente; en cambio, minería y petróleo caen 5%.
El informe del organismo regional de la ONU proyecta que el valor de las exportaciones de bienes de América Latina y el Caribe crecerá un 5% en 2025. Sin embargo, la atención se centra en el bloque del MERCOSUR, donde se espera un aumento del volumen exportado del 6%.
En este punto, la Argentina, junto con Brasil, se destaca como el principal factor detrás de esta expansión, impulsada por el crecimiento proyectado en sus exportaciones agrícolas y agroindustriales.
Uno de los datos más llamativos para Argentina es su baja intensidad comercial con su socio histórico, Estados Unidos, un factor que podría mitigar parte del riesgo generado por las nuevas alzas arancelarias de Washington.
En 2024, solo el 8% de las exportaciones totales de bienes de Argentina tuvieron como destino a EE. UU., con las importaciones provenientes de ese país representando el 10% del total. Esta baja participación contrasta fuertemente con la alta dependencia de México o Centroamérica.
Gracias a que los principales productos de exportación a EE. UU. (dominados por bienes primarios y manufacturas basadas en recursos naturales) no están incluidos en la mayoría de los recientes aumentos, Argentina enfrenta un arancel promedio efectivo de alrededor del 8%, inferior al promedio regional (10%).
A pesar de la baja exposición, Argentina registró un déficit comercial con EE. UU. tanto en el comercio de bienes como en el de servicios. En el caso de los servicios, el déficit argentino es señalado como uno de los mayores de la región, solo superado por Brasil.
Comercio internacional
Respecto al crecimiento de las exportaciones regionales de bienes de América Latina y el Caribe de 5% en 2025, similar al registrado en 2024 (4,5%), se explica por un aumento del volumen exportado del 4% y un alza de los precios del 1%.
Mientras tanto, las importaciones regionales aumentarán 6%, resultante de un aumento del volumen de 7% y una caída de los precios de 1%.
Entre los principales socios comerciales de la región, se prevé que el mayor incremento en 2025 en términos de valor se produzca en las exportaciones a China (7%), asociado principalmente con el crecimiento de las ventas de carne y soja y con los mayores precios de minerales como el cobre.
Los envíos a la Unión Europea crecerían en 6% y a los Estados Unidos en 5%.
Para el comercio intrarregional se proyecta un crecimiento en torno al 1%. Dado el mayor dinamismo estimado de los envíos extrarregionales respecto de los dirigidos a la propia región, se espera una leve reducción del coeficiente de comercio intrarregional, que pasaría del 14% al 13%.
Por otro lado, se proyecta que el valor de las exportaciones regionales de servicios aumente en 8% en 2025, esto es un punto menos que el crecimiento registrado en 2024. Pese a ello, estas exportaciones continúan mostrando un mayor dinamismo que las de bienes en términos de valor.
Diversificación y el impacto en inversión extranjera directa
El informe, presentado por el Secretario Ejecutivo José Manuel Salazar-Xirinachs, resalta que el cambio en la política comercial estadounidense que ha elevado los aranceles efectivos regionales a un promedio del 10% lo que ya hizo caer en los flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) hacia la región.
Frente a la inestabilidad global y las tensiones geopolíticas, la CEPAL lanza una recomendación clave, particularmente relevante para el MERCOSUR.
“La urgencia de que países como Argentina diversifiquen sus mercados y profundicen la integración regional en ámbitos como la infraestructura, la facilitación del comercio y la convergencia regulatoria para mitigar los efectos de las medidas proteccionistas".
La CEPAL sugiere explorar activamente lazos comerciales con la Unión Europea, China, India, la ASEAN y el Consejo de Cooperación del Golfo.
El mayor desafío: la tecnología
Finalmente, el documento aborda el reto de la intensidad tecnológica. La región mantiene una participación limitada en las exportaciones mundiales de bienes de alta tecnología y servicios avanzados, un segmento crucial para el crecimiento de la productividad y el empleo calificado.
La participación de América Latina y el Caribe en las exportaciones mundiales de bienes de alta tecnología se mantiene por debajo del 5%, una cifra que exige la implementación de políticas productivas que impulsen la participación en mercados intensivos en conocimiento.