Paola Tamburelli es una de las funcionarias que todavía mantiene su cargo pese al cambio de gestión. Al frente de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), todavía no define su futuro, aunque en el horizonte aparecen su continuidad en el organismo o formar de la Organización de Aviación Civil Internacional.

Sea cual sea el camino, lo que sí está claro es que los cuatro años de gestión que le tocaron a la funcionaria fueron especiales. "Fueron inéditos. A los dos meses de asumir ya nos agarró la pandemia y nos obligó a cambiar todo", sostuvo la funcionaria a El Cronista, y resaltó que "pasamos de trasladar pasajeros a transportar varados, vacunas e insumos médicos. Todo esto obligó a encarar, entre otras cosas, cambios de normativa, que en parte fue útil porque el mercado se manejaba con reglamentaciones previas a los 70".

- ¿Y qué quedó hoy de todo, ya bastante después de la salida de ese escenario?

- Yo hago mucho hincapié en el tema de los cambios de las normativas porque permitió avanzar de otra forma, pensando el mercado de otro modo. El cambio que se produjo fue muy importante y los efectos quedaron a la vista. De alguna forma paró al sector en otro lugar.

- ¿A qué se refiere?

- Nada de las experiencias anteriores que se dieron en el mercado nos servía porque jamás habíamos atravesado por algo así. Entonces no había un camino ya trazado. Los aviones estuvieron en tierra durante mucho tiempo y había que cambiar todo para trasladar vacunas y respiradores, en lugar de pasajeros. Se llegó a muchos consensos en ese momento, que hoy permiten pararnos en otro lado.

- ¿El efecto positivo de estos cambios también se ven en lo que tienen que ver estrictamente con el negocio?

- Sin dudas. En noviembre de 2020 la actividad volvió a operar y a partir de allí se comenzaron a observar mejoras. Se promovió la conectividad y se sumaron pasajeros tanto en el segmento de cabotaje como en el internacional. Hoy hay 10 empresas más operando en el país, si tomamos turismo y carga, que las que había previo a la pandemia. Esto también se ve en el sistema nacional de aeropuertos, que está concesionado; se dieron cambios muy importantes a nivel infraestructura y servicios en el último tiempo. Hoy permanentemente aparecen aéreas interesadas en venir al país, preguntando si hay acuerdos bilaterales. Las normativas dan mucha certidumbre; brindan un esquema, que no estaba

- ¿Y en cuanto al mercado de cabotaje?

- El trabajo que se hizo ahí es muy importante. Tenemos ya 82 rutas que no pasan por Buenos Aires, algo que abre muchas opciones para mucha gente. Estos destinos son cubiertos por líneas como American Jet, Flybondi o JetSmart, pero también hay que resaltar la importancia de Aerolíneas Argentinas, que es la que termina cubriendo los destinos no rentables, y por esto es muy importante tenerla.

- Se ve una mejora en la cantidad de pasajeros transportados, pese a que la situación económica tal vez no ayudó demasiado.

- Si, y tanto en lo que es cabotaje como internacional. Los vuelos internos en noviembre pasado habían sumado en noviembre de 2022 unos 1.331.000, contra los 1.567.000 del mismo mes de este año. Y en el caso de los internacionales también se dio una mejora; pasó de 1.037.000 a 1.058.000.

- ¿Este crecimiento es posible de mantener en un contexto económico como el actual?

- El transporte aéreo se ampliará, más allá de la situación desafiante en la que estamos hoy. La Argentina es un destino muy mirado por los turistas extranjeros. No hay dudas de que, por pandemia y normativa, el panorama que toca en el arranque de esta gestión es mucho mejor del que me tocó apenas asumí. La Argentina es un mercado con muchas condiciones para seguir creciendo, incluso en este contexto.

- ¿Qué ve que falte para que el mercado argentino de un salto más grande en lo que tiene que ver con el negocio aerocomercial?

- Falta mucha inversión en infraestructura, algo clave. Lo que hicimos en los últimos años fue muy importante, pero todavía falta. Luchamos mucho por mantener en condiciones los aeropuertos, en todo sentido, para garantizar el funcionamiento. Se hicieron inversiones fuertes en aspectos que se visualizan con facilidad, pero también en muchos otros que están en el detrás de escena. Es verdad que para esto el tema cambiario no ayuda mucho, pero entiendo que es un punto que no se puede perder de vista si lo que se pretende es seguir creciendo.