En medio de la escalada de la inflación, fenómeno que no solo tiene lugar en la Argentina, sino en varios países que no la habían registrado en su historia más reciente, un economista ganador del Premio Nobel de Economía brindó una fórmula para ponerle fin.
Se trata del estadounidense Paul Krugman. Analizó el alza mundial de precios y trazó un paralelismo con la situación ocurrida en la década de 1970.
La visión de un Nobel de Economía sobre la inflación
"A partir de 2021 tuvimos realmente un repunte inflacionista, y no era del todo tonto preocuparse de que para volver a situar la inflación en un nivel aceptable haría falta un alto desempleo, como ocurrió después de los años 70", afirmó Krugman en una nota de opinión publicada en The New York Times.
"Lo más famoso fue que Larry Summers, que había ganado mucha credibilidad al predecir correctamente el repunte inflacionista, predijo que la desinflación volvería a ser extremadamente costosa", remarcó.
"Esa segunda predicción no ha envejecido bien; la inflación ha bajado mucho sin que haya aumentado el desempleo. Pero Summers no ha tirado la toalla. La inflación de los años 70 se produjo en dos oleadas, y difundió recientemente un gráfico que pretendía demostrar que la reciente desinflación está siguiendo el mismo camino, a la que sabemos siguió una importante recaída", apuntó comparando ambas situaciones.
Sin embargo, también marcó diferencias. "Como ha señalado Mike Konczal, del Instituto Roosevelt, la mecánica de la desinflación de mediados de los 70 no se parecía en nada a lo que hemos visto recientemente. En los años 70, la desinflación estuvo asociada a un aumento del desempleo, mientras que esta vez se ha asociado a un descenso del desempleo", añadió.
En esa línea, indicó que el mecanismo detrás de la desinflación de Joe Biden "ha sido fundamentalmente diferente". Para el economista, en la década del 70 influyó indefectiblemente el precio real de la energía, que, habiendo subido durante el embargo petrolero árabe de 1973, subió aún más tras la revolución iraní.
Inflación: qué sugiere un Nobel de economía para bajarla
En su análisis, dejando de lado los indicadores similares, Krugman sostuvo que estas diferencias entre las épocas son fundamentales para comprender que los mecanismos aplicados entonces no serán la fórmula óptima ahora.
"En los años 70, muchos contratos salariales incluían complementos por el coste de la vida, de modo que los precios de la energía influyeron en los salarios. Más tenuemente, la subida de los precios del petróleo puede haber impulsado las expectativas de inflación, que a su vez hicieron subir los precios reales", argumentó.
"Dicho esto, la inflación aumentó incluso antes de la segunda crisis del petróleo. ¿Por qué? Es cierto que el desempleo se redujo sustancialmente tras la recesión de 1974-75, pero seguía siendo más alto que en los años 70. Sin embargo, la economía estadounidense se comportaba como si estuviera algo recalentada", siguió el análisis.
"La respuesta convencional es que la tasa natural de desempleo había aumentado, por lo que la economía necesitaba un desempleo más alto para mantener baja la inflación. De hecho, la Oficina Presupuestaria del Congreso estima que la tasa natural aumentó sustancialmente desde los años 70 hasta mediados de los setenta, antes de iniciar un prolongado descenso", añadió Krugman.
"Por lo tanto, en este momento los datos no parecen apoyar la opinión de que estamos en camino de algo parecido", sostuvo el economista.
"Pero la idea de que los años 70 ofrecen una plantilla útil para saber dónde estamos ahora parece bastante errónea. Deberíamos estudiarlos y aprender lo que podamos de ellos. Pero hacer analogías directas entre ahora y entonces es simplemente TRISTE (SAD)", finalizó el texto.