Los fondos buitre no le pedirán al juez de Nueva York Thomas Griesa que reponga el “stay”, la cautelar que le permitiría a la Argentina pagarles a los bonistas del canje y evitar el default mientras estira los plazos de la negociación con los holdouts.

Según publicó la agencia Reuters, el inversor holdout Mark Brodsky desmintió la información de un artículo del diario La Nación que aseguraba que el fondo NML, del magnate Paul Singer, preveía pedirle al juez que reponga el "stay" a cambio de que la Argentina haga un depósito que funcione como garantía para negociar el pago a los holdouts a partir de 2015.

"Ese artículo es ficción absoluta", dijo en un comunicado Brodsky, presidente de Aurelius Capital Management, uno de los holdouts que junto a NML obtuvieron las sentencias favorables para que la Argentina les pague u$s 1.330 millones (que actualizados a hoy rondarían los u$s 1.600 millones) por los títulos en default que tienen en su poder.

La idea de un stay a cambio de un depósito y el compromiso de negociar en 2015 no era nueva, pero había cobrado nueva fuerza cuando faltan apenas seis días para que la Argentina entre efectivamente en cesación de pagos después de entrar en mora el 30 de junio.

Básicamente, la Argentina sostiene que no tiene forma de pagarle o ofrecerle algo a los fondos buitre hasta que a fin de año venza la cláusula RUFO, que establece que si le hace una oferta a algún holdout que mejore lo que aceptaron los bonistas que entraron en los canjes de 2005 y 2010, tiene que igualar esas condiciones para estos últimos. Si esa cláusula se dispara, el costo para la Argentina podría llegar a unos u$s 120 mil millones, además de que la presidenta Cristina Kirchner y los funcionarios involucrados serían pasibles de acciones legales tanto civiles como penales.

Por eso el Gobierno pide negociar en 2015. Pero los fondos buitre desconfían y reclaman gestos firmes para pedir el “stay” –la cautelar que permitiría que se terminen de cursar los pagos de la Argentina por los vencimientos del 30 de junio-.

Por ahora, entonces, sigue todo trabado. Funcionarios del Ministerio de Economía y representantes de los holdouts tienen hoy en Nueva York otra reunión –la cuarta- con el abogado Daniel Pollack, el mediador designado por Griesa para tratar de lograr un acuerdo.