La salida de Guillermo Moreno de la secretaría de Comercio Interior les provocó un gran vacío y muchos admiten que lo extrañan. La administración del comercio, impulsada desde los comienzos del kirchnerismo pero reforzada por el funcionario, les permitió desarrollarse y crecer, acompañados por una demanda que se mantuvo pujante.
Hoy no sólo no lo tienen a Moreno, sino que además comenzaron a percibir que el modelo que tanto apoyaron durante tantos años empezó a tener fisuras que los afectan. No dejan de defenderlo e insistir en la necesidad de mantener los controles a la importación, pero admiten que se requieren correcciones urgentes.
Empresarios nacionales nucleados en la Confederación General Empresaria de la Argentina (Cgera), que preside Marcelo Fernández, celebraron ayer en el hotel Castelar la media sanción que el 27 de noviembre le dio la Cámara de Diputados al proyecto de Ley que declara el 16 de agosto como el Día del Empresario Nacional.
Fue en este contexto que dialogaron con El Cronista sobre la evolución económica, los cambios de gabinete y las expectativas que ello genera en torno a la política de la administración del comercio. Reclamaron agilización de las autorizaciones de las Declaraciones Juradas de Importación (DJAI) para insumos, modificaciones al sistema de compensación de importaciones con exportaciones (1 a 1) y contención de la inflación. También se mostraron preocupados por los reclamos salariales para 2014 y pidieron que no superen el alza de precios.
"Me preocupa la suba de precios; tenemos que resolver este tema rápidamente. La inflación se explica por especulación y también porque hay demanda", manifestó Fernández, quien espera que el acuerdo de precios pueda servir de una vez por todas. Sobre Moreno, precisó que con él los empresarios tenían un diálogo más directo y que con Augusto Costa, su reemplazante, "el vínculo será más online".
Por su parte, el presidente de la Cámara Argentina de Industrias Opticas y Afines (Cadioa), Norberto Fermani, admitió preocupación por "la espiralización de la inflación, reclamos salariales por encima de la suba de precios, la crisis energética y la presión impositiva que sufren las pymes". Sobre Moreno, indicó que "se lo va a extrañar porque más allá de su personalidad y su dureza, es una persona de mucha gestión y honestidad ideológica".
"Un mercado que estaba creciendo hoy se ve afectado por el sistema de compensación del 1 a 1", se quejó el presidente de la Cámara Industrial de Manufacturas del Cuero (CIMA), Daniel Donikián. Se refería, por un lado, a que muchos exportadores que tenían saldo exportable comenzaron a importar producto terminado. Pero lo que también ocurrió es que los exportadores comenzaron a cobrar sobreprecios a importadores que necesitaban exportar y ello hizo que se encarezca el precio del cuero para los manufactureros locales.