La organización de la IV Conferencia Mundial contra el Trabajo Infantil, que tendrá lugar en Buenos Aires en noviembre próximo, le provocó más de un dolor de cabeza al ministro de Trabajo, Jorge Triaca, en medio de su participación en las deliberaciones de la asamblea anual de la OIT en Ginebra. Las delegaciones de la CGT y las dos CTA lanzaron las primeras críticas contra el funcionario de la administración de Mauricio Macri debido a la elección de la sede de la Sociedad Rural de Palermo para la realización de la conferencia, por representar esa actividad empresaria uno de los sectores más cuestionados por la informalidad y precarización laboral y el trabajo infantil.
También desde la propia OIT hicieron saber a Triaca su malestar por esa decisión e insistieron en la necesidad de modificar el lugar para el desarrollo de la conferencia, prevista entre el 14 y 16 de noviembre próximo. Finalmente, la Confederación Sindical de trabajadores y trabajadoras de las Américas (CSA) remitió una nota ayer al funcionario para expresar su malestar por la situación.
"Un evento internacional de esta magnitud y categoría debe evitar caer en cualquier tipo de mensajes que puedan ser interpretados como ofensivos y debe procurar consensos en todos los momentos e instancias. Por tanto, solicitamos respetuosamente se busque un lugar más adecuado", expresaron las autoridades de la CSA en el escrito dirigido a Triaca.
"Esto es un verdadero papelón internacional", criticaron a su turno desde la delegación de la CGT.