El reino de Bélgica envió una misión económica encabezada por la princesa Astrid, hermana del monarca Felipe, con 137 empresarios y 45 representantes del gobierno de Bruselas, entre los que hay seis ministros.
La vicepresidenta Gabriela Michetti fue la encargada de recibir ayer a la integrante de la casa real de los belgas, en el inicio de una visita de tres días que incluirá seminarios, rondas técnicas y de negocios, y el posible anuncio de inversiones.
"Nuestras empresas vienen interesadas por la apertura que la Argentina muestra al mundo, y vienen a comprar, a vender, y a evaluar inversiones", dijo a este diario el embajador belga en Buenos Aires, Peter Maddens.
La misión económica procura atraer a las empresas exportadoras argentinas a preferir las terminales marítimas belgas (Lieja, Amberes, Gante) en lugar del tradicional puerto de Rotterdam, en Holanda, para ingresar a Europa.
Los belgas también mostraron interés en la previa del viaje por desarrollar la infraestructura portuaria, especialmente en Bahía Blanca, y profundizar las obras de dragado en diferentes espacios fluviales, como lo viene haciendo, por caso, la firma Jan De Nul.
Otras compañías representadas provienen del sector de la energía y la medicina nuclear, las energías renovables, y del campo de la salud, que ambicionan proveer maquinaria pesada o bien transferir tecnología. A su vez, también es fuerte el comercio de arte argentino en Europa a través de la plaza belga.
En términos de inversiones, los belgas ven con atención el sector digital y los desarrollos para la generación de energía a partir de desechos agropecuarios.
Los funcionarios belgas mantuvieron reuniones de trabajo con el canciller Jorge Faurie y el ministro de Hacienda y Finanzas, Nicolás Dujovne, y este martes asistirán a un seminario con el titular de la cartera de Trabajo, Jorge Triaca.
La Argentina y Bélgica totalizaron intercambios en 2017 por 985 millones de euros, con un déficit comercial para la Argentina de 294,6 millones. Los principales productos de la balanza son químicos (entre ellos, medicamentos), maquinaria, productos minerales y alimenticios.