El gobierno de Javier Milei apunta a completar dos lugares de la Corte Suprema de Justicia, luego de que quedara vacante en octubre de 2021, con la renuncia de Elena Highton de Nolasco, y que el juez Juan Carlos Maqueda cumpla los 75 años y llegue a la edad de retiro. ¿Tiene el respaldo político para hacerlo?
Por conferencia de prensa, este mediodía, el portavoz de Presidencia, Manuel Adorni, anunció que esta misma tarde se daría a conocer el nombre del candidato. Finalmente se confirmó que Ariel Lijo, hoy juez federal de Comodoro Py, era el elegido para reemplazar a la magistrada Elena Highton de Nolasco, y cubrir la quinta vacante en el tribunal desde su salida.
Asimismo, el académico Manuel García-Mansilla, decano de la facultad de Derecho de la Universidad Austral, fue el elegido del Gobierno para ocupar el lugar de Maqueda. Para que ambos nombramientos prosperes, el acompañamiento del PJ será decisivo.
"La designación de los ministros de la Corte es una atribución que le corresponde al Presidente de la Nación con acuerdo del Senado por dos tercios de sus miembros presentes, en sesión pública convocada al efecto", establece la Constitución Nacional.
Desde la renuncia de Highton de Nolasco, la quinta silla de la Corte Suprema permanece vacía. Alberto Fernández jamás envió un candidato, luego del revés que sufrió por parte de los propios, con Cristina Kirchner a la cabeza, con la postulación de Daniel Rafecas como procurador Federal de la Nación
La Vicepresidenta jamás impulsó el tratamiento de su pliego en el Senado y el asunto quedó en la nada.
Ahora, es Javier Milei quien apuesta a nombrar al magistrado que completará la Corte que hoy integran Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti. Pero, para eso, será clave contar con la venia de la oposición incluyendo, a Unión por la Patria.
Para que el pliego de Lijo llegue a buen puerto, La Libertad Avanza deberá reunir el aval de dos tercios de los presentes en el Senado, la Cámara que lidera Victoria Villarruel y en la que el oficialismo cuenta con apenas siete bancas.
Así las cosas, y suponiendo que el día en que el pliego de Lijo y el de García-Mansilla lleguen al recinto haya asistencia perfecta, La Libertad Avanza deberá reunir 48 voluntades en total.
El número máximo que logró sumar Villarruel desde que desembarcó en la Cámara alta fue 39. Lo hizo en la sesión preparatoria en la que se votaron las autoridades del cuerpo y los criterios para la conformación de las comisiones.
Entre esos 39 se encontraban, además de los propios, todos los integrantes de la oposición salvo Unión por la Patria. Es decir que Villarruel deberá sumar a nueve senadores del interbloque que conduce José Mayans para que el pliego de Lijo y el de García-Mansilla lleguen a destino.
¿Tendrá los números? Al menos hasta ahora, en el interbloque que reúne 33 senadores no se pronunciaron públicamente. "Haremos nuestro análisis", dijo una importante fuente de Unión por la Patria a este medio.
Al mismo tiempo, uno de los integrantes del interbloque recordó que "siempre" antes de enviar los pliegos "se consulta políticamente" al resto de las bancadas, y que, el oficialismo, en esta oportunidad, no lo hizo. Es por eso que dejaron saber que sortear esa instancia "no cayó bien" entre los senadores del PJ.