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La cáscara de papa y el bicarbonato son dos recursos que muchas familias ya usan en la cocina y el hogar. Juntos se transforman en una pasta fácil de preparar que sirve para limpiar manchas de óxido en utensilios, herramientas y pequeños objetos metálicos.
Este truco combina acción química leve y capacidad abrasiva. Es barato, aprovecha desperdicios y evita, en muchos casos, productos industriales más agresivos. A continuación, explicamos cómo funciona y en qué casos es útil.
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¿Por qué recomiendan mezclar cáscara de papa y bicarbonato?
La combinación de cáscara de papa con bicarbonato de sodio cuenta con una base científica que respalda su eficiencia. El bicarbonato funciona como un agente pulidor y desinfectante, capaz de eliminar la capa de corrosión que se genera sobre los metales. A su vez, la cáscara de papa posee ácido oxálico, un compuesto natural que ayuda a remover los restos de óxido.
En conjunto, estos componentes provocan una reacción química que afloja y elimina las manchas de óxido sin perjudicar la superficie original. Se trata de una alternativa casera y efectiva para restaurar utensilios de cocina de hierro o acero que, debido a la humedad y el uso constante, comienzan a oxidarse.
¿Cómo eliminar las manchas de óxido?
Este método resulta muy sencillo de aplicar y no necesita productos costosos ni herramientas especiales. Para preparar la mezcla, se deben seguir los siguientes pasos:
- Esparcir bicarbonato de sodio directamente sobre la pieza oxidado.
- Colocar cáscara de papa sobre el área afectada o, si se puede, introducir el objeto en una papa partida.
- Dejar reposar durante toda la noche, permitiendo que los compuestos actúen sobre el óxido.
- Al día siguiente, cepillar bajo agua corriente, frotando con energía hasta eliminar los residuos de corrosión.
Este proceso puede repetirse varias veces en caso de que el óxido esté muy incrustado, y se recomienda secar completamente el objeto una vez finalizado, para prevenir que la corrosión reaparezca.
¿Cómo evitar la oxidación en las sartenes?
La manera más efectiva de prevenir que las sartenes de hierro se oxiden es asegurarse de que queden totalmente secas tras cada lavado. La humedad es el principal enemigo de este tipo de utensilios, ya que acelera el proceso de oxidación. Por ello, resulta esencial secarlas con un trapo limpio y seco, y guardarlas en lugares cerrados o con poca ventilación.
Otro aspecto fundamental es el correctoalmacenamiento. Una vez que esté seca, se puede aplicar una fina capa de aceite vegetal tanto en su interior como en el exterior para crear una barrera protectora contra el óxido. Además, es recomendable guardarla en un sitio seco y bien ventilado, alejada de fuentes de humedad. Si se apilan varias sartenes, lo ideal es colocar una hoja de papel o un paño entre ellas para evitar rayones o daños.