

El impuesto 4x1000, conocido también como Impuesto a los Movimientos Financieros (IMF), es un tributo que ha estado presente en el sistema financiero colombiano desde su creación en 1998.
A pesar de varias reformas y ajustes a lo largo de los años, sigue siendo un cobro vigente para muchos colombianos.
¿En qué consiste el 4x1000?
El impuesto 4x1000 se aplica sobre cada movimiento financiero realizado por las personas naturales y jurídicas, es decir, sobre las transacciones bancarias que incluyen retiros, transferencias, pagos y abonos en cuentas corrientes y de ahorro.

El porcentaje establecido por el Gobierno es del 0,4% de la cantidad total de cada transacción. Esto significa que por cada $1.000 que se muevan a través del sistema financiero, el banco cobrará $4, lo que se traduce en un cargo por cada movimiento.
¿Por qué sigue vigente el 4x1000?
Recaudo de recursos para el Estado: uno de los principales motivos por los cuales este impuesto sigue vigente es su función como una fuente significativa de ingresos para el gobierno colombiano. Los recursos obtenidos del 4x1000 se destinan principalmente al financiamiento de diferentes programas sociales y proyectos gubernamentales, incluyendo aquellos relacionados con la salud, la infraestructura y el bienestar social.
Mantenimiento de la estabilidad fiscal: el impuesto 4x1000 ha sido considerado una herramienta para ayudar a estabilizar las finanzas públicas, especialmente en tiempos de crisis o de necesidad de recursos adicionales. Si bien se han presentado discusiones sobre su impacto en la economía y en los ciudadanos, es uno de los tributos más fáciles de aplicar y que genera un flujo constante de dinero.
Reforma tributaria y ajustes graduales: aunque ha existido debate sobre la eliminación del 4x1000, muchas reformas tributarias han tenido como objetivo su modificación o ajuste, más que su eliminación total. Por ejemplo, en varias ocasiones se han ajustado los montos exentos de cobro, buscando aliviar la carga para aquellos que realizan movimientos pequeños. Sin embargo, aún no se ha dado una reforma estructural que elimine completamente el impuesto.
Impacto limitado sobre ciertos sectores: el 4x1000 sigue aplicándose debido a que afecta principalmente a los grandes movimientos financieros. En general, aquellas personas que realizan movimientos pequeños o moderados no ven un impacto tan alto. Además, existen exenciones y umbrales que permiten a ciertos ciudadanos no verse gravemente afectados por este cobro.
¿Cuál es el futuro del 4x1000?
Existen voces dentro del ámbito político y económico que piden la eliminación o reforma profunda de este impuesto, argumentando que su efecto es regresivo y afecta más a los sectores de menores ingresos.

No obstante, hasta la fecha no se ha concretado una medida que ponga fin al 4x1000, y es posible que el impuesto continúe en el futuro cercano, aunque con ajustes o modificaciones a su estructura.
Mientras tanto, los colombianos deben seguir asumiendo este costo por cada transacción financiera, aunque algunos sectores siguen luchando por su reforma o eliminación.









