

La reforma laboral en Colombia, vigente desde el pasado 25 de julio de este año, introduce diversos cambios en la estructura laboral de cara a los próximos años. En este marco, ¿qué trabajadores pueden pedir una licencia sin el diagnóstico previo de un especialista?
En Colombia, la reforma laboral ya está vigente y, si bien no introduce una licencia por salud mental automática o sin justificación médica, sí ha abierto espacio a una interpretación más flexible sobre los permisos laborales relacionados con el bienestar emocional.
En la práctica, un trabajador ahora puede acceder a una incapacidad por estrés o malestar emocional sin la necesidad de poseer previamente un diagnóstico emitido por un psiquiatra o un psicólogo. Esta situación se genera cuando un médico general determina otorgar unos días de reposo mientras se canaliza la atención hacia un especialista.

Reforma laboral en Colombia: trabajadores puede pedir licencia sin el diagnóstico de un especialista
En muchos casos, el médico tiene la potestad de emitir una incapacidad temporal por estrés laboral, ansiedad leve, alteraciones del sueño, u otros síntomas relacionados. En caso de que se considere necesario, remite al paciente a psiquiatría o psicología, donde se podría establecer un diagnóstico clínico formal que justifique una incapacidad más prolongada.
El avance en este tipo de normativas se enmarca en la nueva Ley de Salud Mental (Ley 2460 de 2025), la cual prioriza la atención temprana y sin estigmas. Si bien esta no modifica el procedimiento legal para las incapacidades, fortalece el derecho del empleado a recibir atención emocional sin límites.
Reforma laboral: cómo se pide licencia sin un diagnóstico previo
En este escenario, los trabajadores ya pueden pedir licencia por salud mental a través de un proceso abarcado por un médico general. Esto se da especialmente en situaciones en la que los pacientes presentan síntomas compatibles con estrés o sobrecarga emocional. L

No es una licencia "sin diagnóstico" como tal, pero sí representa un cambio importante: ya no se exige que un especialista intervenga desde el primer momento, lo cual reduce las barreras de acceso y reconoce la salud mental como parte integral del bienestar laboral.












