

El miércoles 26 de noviembre, las autoridades estadounidenses arrestaron a Hediyeh Hashemi, una mujer de 24 años que habría creado varios perfiles falsos en TikTok para acosar y difamar a su compañera de trabajo, identificada como Fardous Abdalla.
De acuerdo a la denuncia presentada por la víctima en abril de 2025, allegados suyos descubrieron múltiples cuentas que suplantaban su identidad y publicaban comentarios ofensivos y difamatorios sobre aspectos de su vida personal. Las autoridades iniciaron una investigación que culminó en la captura de la joven.
La mujer habría suplantado a su compañera en varias cuentas de TikTok
Según información divulgada por El Tiempo, en abril una amiga de Fardous Abdalla le alertó sobre la existencia de varios perfiles falsos en TikTok que usaban su nombre, fotografías de ella y de su padre, además de datos personales y mensajes que exponían detalles de su vida privada.

Para identificar a la persona detrás de las cuentas, las autoridades del condado de Bexar, en San Antonio (Texas), solicitaron colaboración a TikTok y enfocaron la búsqueda en uno de los perfiles falsos, @dosastripper28. Aunque el usuario ya no estaba activo, la plataforma proporcionó información técnica que permitió rastrear el correo electrónico asociado.
Cómo las autoridades lograron identificarla y qué cargos enfrenta
El rastreo digital realizado por los investigadores permitió conectar la dirección de correo usada para registrar uno de los perfiles falsos con un e-mail corporativo perteneciente a Hediyeh Hashemi, una conocida de la víctima en el trabajo.
Las autoridades procedieron a detenerla el 26 de noviembre. La joven enfrenta cargos por suplantación de identidad en medios electrónicos, según confirmó el detective Jesse Sánchez, miembro de la Unidad de Explotación Humana de la Policía de San Antonio, quien estuvo al frente de la investigación.
Quedó en libertad, pero con restricciones mientras avanza el caso
Hashemi había trabajado previamente en la misma empresa que Fardous Abdalla, lo que facilitaba su acceso a información personal de la víctima. Tras su arresto, recuperó la libertad luego de pagar una fianza de 7.500 dólares, pero quedó sujeta a estrictas condiciones mientras avanza el proceso judicial.

Por orden del juez, ambas mujeres tienen prohibido cualquier tipo de contacto, ya sea en persona, por redes sociales o a través de terceros, mientras se adelanta la investigación.











