Novak Djokovic le ganó el juicio al gobierno de Australia. El tenista serbio estuvo detenido 5 días y se le retuvo su pasaporte por que su visa no fue aprobada ya que no demostró una razón médica que justificara que no está vacunado contra el coronavirus, como exige ese país a los extranjeros. Sin embargo, el Gobierno todavía puede deportarlo. Y el número 1 del tenis mundial se quedaría sin participar del primer Grand Slam de 2022.
En la madrugada del lunes (hora argentina), Novak Djokovic dejó el hotel de refugiados en Melbourne donde estuvo detenido desde el miércoles pasado, luego que en el aeropuerto la Policía de Frontera le retuvo su pasaporte al no tener aprobada la visa de ingreso al país. Viajó para jugar el primer Grand Slam de la temporada, que comienza el próximo lunes 17 de enero.
La detención de 'Nole' Djokovic provocó un escándalo diplomático entre Australia y Serbia. El juez australiano de Corte de Circuito, Anthony Kelly, le devolvió la visa al tenista y le ordenó al Gobierno que libere a Djokovic en los 30 minutos siguientes.
Sin embargo, Australia todavía tiene un as bajo la manga y podría finalmente deportarlo. Si el ministro de Inmigración aplica ese último recurso, Djokovic no podría volver a entrar al país por tres años
Por qué pueden deportar a Novak Djokovic
El ministro de Inmigración de Australia, Alex Hawke, está considerando cancelar la visa de Novak Djokovic. Eso implica no sólo que sería deportado sino que, además, no podría volver a entrar al país por tres años.
"Después de la decisión del Tribunal de Familia y Circuito Federal de hoy sobre una base procesal, queda dentro de la discreción del ministro de Inmigración Hawke evaluar cancelar la visa del señor Djokovic de acuerdo a la sección 133C (3) de la Ley de Migración", dijo el portavoz de la cartera de Inmigración, Ciudadanía, Servicios Migratorios y Asuntos Multiculturales de Australia.
Y agregó: "El Ministro está considerando el asunto actualmente y el proceso (contra Djokovic) sigue en curso".
Novak Djokovic, de 34 años, es el tenista número 1 del ranking mundial, perdió días cruciales de entrenamiento de cara a su participación en el Abierto de Australia, en busca de su título 10 en ese Grand Slam, que sería su cuarto consecutivo y le permitiría convertirse en el máximo ganador de Grand Slam de la historia, superando al español Rafael Nadal y al suizo Roger Federer, con los que está igualado en 20.
