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El chucrutes un plato ampliamente conocido por su sabor ácido y textura crujiente. Se trata de un superalimento, que contiene más probióticos que el yogur y el kéfir, y es muy consumido en dietas saludables.

Esta sencilla receta es muy fácil de hacer y te permitirá disfrutar de sus múltiples beneficios para la salud, como una mejor digestión, un sistema inmunológico más fuerte y una piel radiante.

Chucrut, una fuente inagotable de probióticos

El chucrutes un plato saludable que se destaca por su alto contenido de probióticos, superando incluso a alimentos tan reconocidos como el yogur y el kéfir.

Esta exquisita preparación tiene más probióticos que el yogur (Fuente: Pexels)
Esta exquisita preparación tiene más probióticos que el yogur (Fuente: Pexels)

Según el portal de Saber Vivir, durante su proceso de fermentación, se generan diversas cepas bacterias beneficiosas para la salud intestinal. Estas bacterias probióticas ayudan a:

  • Mantener el equilibrio de la flora intestinal
  • Favorecen una digestión saludable y una adecuada absorción de nutrientes.
  • Fortalecen el sistema inmunológico al promover la producción de anticuerpos y células defensivas.

El chucrut también aporta fibra, vitaminas y minerales esenciales, convirtiéndolo en un verdadero superalimento probiótico único en su tipo.

Las bacterias probióticas del chucrut ayudan a mantener el equilibrio de la flora intestinal, favoreciendo una digestión saludable y una adecuada absorción de nutrientes (Fuente: Pexels)
Las bacterias probióticas del chucrut ayudan a mantener el equilibrio de la flora intestinal, favoreciendo una digestión saludable y una adecuada absorción de nutrientes (Fuente: Pexels)

¿Cómo preparar tu propio chucrut?

Si bien es más sencillo encontrarlo en supermercados, despensas y dietéticas, muchos prefieren tener sus propias reservas realizar su propia receta de chucrut para asegurarse tener un sabor perfecto o los nutrientes necesarios.

Ingredientes:

  • 1 repollo grande
  • Sal marina

Paso a paso:

  • Lavá y cortá el repollo en tiras finas.

  • Mezclá el repollo con la sal marina. Se calcula aproximadamente 1 o 2 cucharadas de sal por cada 500 gramos de repollo.

  • Masajeá el contenido hasta que suelte jugo.

  • Colocá el repollo y su jugo en un frasco de vidrio esterilizado.

  • Presioná el repollo para sumergirlo en jugo, debe quedar completamente sumergido. Si falta líquido, podés añadir agua con sal hasta que el repollo quede cubierto.

  • Cubrí el frasco con una gasa y asegurá con una banda elástica. Es necesario que el chucrut respire para asegurar una buena fermentación.

  • Dejá fermentar en un lugar oscuro, a temperatura ambiente (18-22° C), durante 2 a 4 semanas.

  • Controlá el repollo periódicamente para asegurar que esté sumergido. Retirá cualquier rastro de espuma o moho.

  • Cumplido el tiempo de fermentación, cerrá el frasco hermético. Guardá en la heladera para detener la fermentación y conservá. ¡Tu chucrut está listo para consumir!