Los aeropuertos funcionan bajo un esquema de controles sucesivos diseñados para garantizar la seguridad y el orden del tránsito aéreo. Verificar la identidad del pasajero es el primer paso para confirmar quién viaja, mientras que la validación delboleto asegura el acceso correcto al vuelo. Pero existe un tercer filtro, muchas veces subestimado, que resulta igual de decisivo.
Ni documento de identidad ni boleto: nadie puede viajar en avión sin cumplir este requisito
Antes de emprender un viaje en Estados Unidos, resulta fundamental revisar con detalle las regulaciones del equipaje de mano. La normativa, definida por la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA), establece el límite de tamaño y peso permitido, con el fin de garantizar la seguridad de todos los pasajeros.
La mayoría de las aerolíneas en Estados Unidos siguen estas dimensiones máximas aproximadas:
- Equipaje de mano: 56 x 36 x 23 cm (22 x 14 x 9 pulgadas)
- Artículo personal (mochila pequeña, cartera): 45 x 35 x 20 cm (18 x 14 x 8 pulgadas)
Más allá de estas directrices generales, las autoridades recomiendan revisar las políticas específicas de cada aerolínea antes de viajar.
¿Qué pasa con los pasajeros que no cumplen este requisito?
En los aeropuertos de Estados Unidos, el cumplimiento del tamaño y peso del equipaje de mano es una norma estricta que se controla en el mostrador de la aerolínea, en la puerta de embarque e incluso en los puntos de seguridad. Cuando un pasajero no respeta los límites establecidos, el procedimiento varía según la compañía, pero suele tener consecuencias inmediatas.
En la mayoría de los casos, si la valija excede las medidas permitidas, el personal obliga al viajero a registrar el equipaje en bodega. Esto implica pagar un cargo adicional que puede ser más alto que la tarifa de despacho anticipado. Si el problema se detecta en la puerta de embarque, la situación es más engorrosa: el equipaje se retira en ese momento, lo que genera demoras en el embarque y costos extras para el pasajero.
En vuelos con mucha ocupación, las aerolíneas aplican un criterio aún más estricto, ya que el espacio en los compartimentos superiores es limitado. En casos extremos, cuando un viajero se niega a cumplir con las reglas o causa incidentes, puede ser denegado el embarque.