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El orégano, una de las especias más utilizadas en la cocina, comenzó a ganar protagonismo en redes sociales por un uso poco común: muchas personas aseguran que arrojarlo por el desagüe ayuda a eliminar los malos olores y limpiar las cañerías.

Sin embargo, detrás de este popular truco casero, hay algunos detalles que conviene conocer antes de probarlo.

Un aroma natural con poder antibacteriano

El interés por el orégano fuera del ámbito culinario se debe a sus reconocidas propiedades aromáticas y antibacterianas. Contiene compuestos naturales como el carvacrol y el timol, que actúan como desinfectantes y neutralizan olores intensos. Por eso, algunas personas recomiendan colocar un puñado de orégano seco en el fregadero y dejar correr un poco de agua caliente para que su fragancia se extienda por la cocina.

De esta manera, el orégano puede ayudar a refrescar el ambiente y disimular el olor a humedad o caños sucios, una alternativa natural a los desodorantes químicos para el hogar.

Qué beneficios puede tener el uso del orégano para limpiar la cocina

  • Neutraliza los olores: su aroma fuerte y persistente ayuda a tapar los malos olores del desagüe.
  • Combate bacterias: los aceites esenciales del orégano poseen efectos antimicrobianos reconocidos por la ciencia.
  • Opción ecológica: quienes buscan soluciones naturales lo consideran una forma menos agresiva de mantener limpia la cocina.

Las advertencias que no hay que ignorar

Aunque muchos usuarios aseguran buenos resultados, los especialistas en plomería advierten que esta práctica no es tan inocente como parece. El principal riesgo es que las hojas secas del orégano no se disuelven completamente, lo que puede generar acumulación de residuos en las cañerías con el paso del tiempo.

Además, los expertos señalan que el orégano solo disfraza el olor, pero no elimina la causa real del problema, que suele estar relacionada con grasas, restos de comida o suciedad acumulada en los tubos.

Cuál es la alternativa más segura

Si el objetivo es mantener los caños limpios y sin olor, los expertos recomiendan usar vinagre blanco y bicarbonato de sodio, dos ingredientes que limpian en profundidad sin causar obstrucciones. El orégano, en cambio, puede dejar una sensación de frescura temporal, pero no reemplaza una limpieza efectiva.