El gobierno de Estados Unidos entró en un cierre parcial que ya genera incertidumbre sobre el funcionamiento de las agencias federales, la economía y millones de trabajadores.
Se trata del primer shutdown en casi siete años y sus consecuencias alcanzan desde los servicios públicos hasta áreas sensibles como la salud y la seguridad nacional.
Cómo afecta el cierre del Gobierno a los ciudadanos
Durante esta suspensión, miles de empleados federales quedan sin sueldo o con licencias temporales. Algunas funciones consideradas esenciales -como el control aéreo, la seguridad en aeropuertos o las operaciones de inmigración- continuarán.
Sin embargo, otras se verán reducidas, lo que impactará directamente en la atención al público y en programas de asistencia.
Cómo afecta al área de la Salud y programas sociales
Los pagos de Medicare y Medicaid seguirán activos, aunque podrían enfrentar retrasos en ciertos trámites debido a la falta de personal. En tanto, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) planean suspender parte de sus actividades de investigación, lo que limita la prevención de brotes y el apoyo a autoridades locales.
En los Institutos Nacionales de Salud (NIH), los pacientes en tratamiento recibirán atención, pero no se podrán iniciar nuevos ensayos clínicos, salvo excepciones. Esto amenaza con frenar avances en la investigación médica.
Qué pasa con la economía y vivienda
El cierre también podría afectar al mercado inmobiliario. La FEMA advirtió que no se emitirán nuevas pólizas del seguro contra inundaciones, requisito para acceder a determinadas hipotecas.
Si el shutdown se prolonga, incluso el Fondo de Ayuda para Desastres podría agotarse.
Personal reducido para la NASA y la FDA
Mientras tanto, las agencias como la NASA, la FDA y el Departamento de Estado mantendrán parte de sus actividades, aunque con personal reducido. El desafío será sostener servicios básicos sin comprometer la seguridad ni la economía en un escenario de alta tensión política.
El cierre del gobierno en Estados Unidos no solo es un problema administrativo: marca un momento crítico en el que la parálisis política golpea de lleno a los ciudadanos, desde los viajeros que buscan ingresar al país hasta los pacientes que dependen de programas de salud.
Parques nacionales en riesgo de cierre
Uno de los puntos más sensibles son los parques nacionales. Aunque algunos sitios al aire libre permanecerán abiertos, los centros de visitantes y espacios que requieren personal podrían clausurarse.
En cierres anteriores, lugares emblemáticos como Yellowstone y Yosemite sufrieron vandalismo y daños por la falta de guardaparques.