En esta noticia

Aunque el aceite esencial de lavanda es uno de los más populares y versátiles que se utilizan en la aromaterapia, algunas de sus composiciones o bien su administración puede desembocar en resultados adversos para la salud.

Realizado a partir de la planta de lavanda, este aceite tiene una amplia gama de beneficios y diferentes usos en las terapias alternativas, pero lo que los consumidores de este aceite no saben es que corren altos riesgos de intoxicación.

Aceite de lavanda: ¿solución o problema para la salud?

Laintoxicación con esencia de lavanda puede ocurrir cuando alguien ingiere grandes cantidades de este aceite, lo que puede ser accidental o intencional. Si esto ocurre, te contamos todo lo que puede pasar, los síntomas y cómo solucionarlo.

¿Por qué es tóxico el aceite esencial de lavanda?

La esencia de lavanda se encuentra en perfumes y sustancias aromáticas, en este se encuentran elementos tóxicos como el acetato de linalilo y linalol. Se trata de dos compuestos químicos que se encuentran comúnmente en los aceites esenciales, incluyendo el aceite esencial de lavanda. Ambos son conocidos por sus propiedades aromáticas y sus beneficios terapéuticos.

Ambos son componentes clave en muchos aceites esenciales, especialmente en el aceite esencial de lavanda. Sus propiedades terapéuticas y su agradable aroma los hacen valiosos en la aromaterapia, en la fabricación de productos de cuidado personal y en otros usos medicinales y cosméticos. A pesar de ello, su ingesta está contraindicada.

¿Cuáles son los síntomas de la intoxicación por aceite de lavanda?

Algunos de los síntomas de una intoxicación con aceite de lavanda incluyen:

  • Visión borrosa
  • Dificultad respiratoria
  • Ardor y dolor en la garganta
  • Quemaduras oculares (si ingresa en los ojos)
  • Confusión
  • Disminución en el nivel de consciencia
  • Diarrea (acuosa, con sangre)
  • Dolor de estómago
  • Vómitos
  • Sarpullido

Si alguno de estos síntomas se presenta, busque ayuda médica inmediata y procure no provocar el vómito a la persona a menos que el centro de toxicología o atención médica se lo indiquen.