El mercado de pases corporativos está pasando por uno de sus momentos de mayor actividad de los últimos tiempos. Desde principios de año, la actividad de los reclutadores se mantuvo por encima de lo habitual y los cambios de nombre en los directorios empresarios están a la orden del día.
Cambios de gerentes, directores e, incluso, nuevos CEO ya son moneda corriente. Y quienes construyeron una carrera para aparecer en el radar de los headhunters tienen más chances de aprovechar la oportunidad.
"Estar en el radar de los reclutadores no empieza cuando uno decide buscar trabajo. De hecho, los headhunters construimos relaciones con ejecutivos a lo largo del tiempo: conocemos sus trayectorias, sus motivaciones profesionales y su estilo de liderazgo. Esa cercanía nos permite identificar rápidamente quién puede hacer fit con una oportunidad, incluso hacer alguna presentación espontánea a nuestros clientes", dijo Joaquín Lizaso, Office Manager de Spencer Stuart.
En ese sentido, es fundamental mantener activa la red de contactos y no dejarla dormir nunca. Incluso cuando un profesional no tiene intenciones de cambiar de trabajo, es necesario desarrollar el networking.
Tejer la red
Ezequiel Palacios, director asociado de Glue Executive Search, señaló que conviene hacer un mapeo de las consultoras y cuáles son las adecuadas, de acuerdo con el seniority y la industria. Conocerlos y juntarse a tomar un café permite estar dentro de las opciones que se barajan cuando surge una oportunidad.
"El vínculo con recruiter se puede construir tanto desde el lado del consultor como desde el del profesional. Es un ejercicio que se puede hacer desde el inicio de la carrera, pero que conviene profundizarlo desde el nivel gerencial", explicó Palacios y agregó que cuando llega el momento de la búsqueda, aunque los reclutadores tratan de ampliar su red, hay una pequeña ventaja para aquellos con quienes ya estableció un vínculo.
Una de las claves para ingresar en el radar de los selectores consiste en sostener una estrategia de visibilidad efectiva. Alejandro Mascó, socio de Faro HR, destacó la regla de las tres a: asertividad en el contenido, articulación con la red y autenticidad en el estilo.
"Con respecto a la asertividad, el primer paso para ganar visibilidad es contar con un perfil profesional claro, coherente y orientado a resultados", dijo.
Marca personal
Es conveniente tener LinkedIn actualizado y usarlo para compartir contenido de valor estratégico para el perfil. Allí se deben detallar logros concretos y medibles e incluir palabras clave vinculadas con el sector. El currículum, en tanto, deber ser breve, enfocado en impacto y logros, con secciones diferenciadas que destaquen proyectos transformacionales, resultados obtenidos y habilidades de liderazgo.
En cuanto a la articulación, Mascó recomendó participar activamente en espacios relevantes del ecosistema profesional, como cámaras y asociaciones. Además, asistir a conferencias, foros, webinars y eventos sectoriales -ya sea como asistente, panelista o speaker- ofrece oportunidades concretas de exposición.
Por último, debe prevalecer la autenticidad en la construcción de la marca personal. Es importante tener claridad sobre su propia propuesta de valor.
"Los perfiles que saben qué aportan, qué los diferencia y lo comunican con convicción generan impacto. No se trata solo de tener experiencia, sino de saber contarla estratégicamente", cerró Lizaso, de Spencer Stuart.