¿Consumes avena? Si es así, debes saber que la avena es uno de los cereales más completos y versátiles en la dieta humana. Su consumo en licuados matutinos aporta energía, saciedad y contribuye a mejorar distintos aspectos de la salud.
De acuerdo con los Institutos Nacionales de Salud, NIH, "la avena contiene betaglucano, un tipo de fibra con efectos comprobados para reducir el colesterol y con propiedades antidiabéticas". Este componente, junto con otros bioactivos, explica sus múltiples beneficios.
Avena para el colesterol y la salud del corazón
El consumo habitual de licuados de avena está directamente relacionado con la reducción del colesterol LDL, conocido como colesterol malo. Según los NIH, "el betaglucano es el principal compuesto activo de la avena con efectos comprobados para reducir el colesterol".
Por otro lado, este cereal ayuda a proteger la salud cardiovascular al prevenir la aterosclerosis. Los compuestos fenólicos y las avenantramidas presentes en la avena actúan como agentes antioxidantes, reforzando la función arterial y disminuyendo el riesgo de enfermedades coronarias.
Avena para el metabolismo, la microbiota y el control de peso
Los licuados de avena también son aliados en dietas de control de peso y regulación metabólica. Los NIH señalan que "el consumo de avena es beneficioso para la salud humana al promover la inmunomodulación y mejorar la microbiota intestinal".
Su fibra dietética regula la glucosa en sangre, prolonga la saciedad y reduce picos de insulina. A largo plazo, esto favorece la pérdida de peso y ayuda a prevenir enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2.
Se comprobó que la avena es saciante natural
Uno de los beneficios más destacados de los licuados de avena es su poder saciante. Según los NIH, "la avena aporta fibra y compuestos bioactivos que ayudan a prolongar la sensación de plenitud después de comer".
Este efecto hace que quienes la consumen tiendan a reducir la ingesta calórica en el resto del día. Así, la avena se convierte en una opción ideal para desayunos nutritivos y equilibrados.
La avena y enfermedad celíaca: lo que debes saber
Las investigaciones del NIH indican que "la mayoría de las personas con enfermedad celíaca pueden comer cantidades moderadas de avena sin que les haga daño", siempre que esté certificada libre de gluten.
Sin embargo, advierten que el contacto cruzado con granos que contienen gluten es frecuente. Por ello, es recomendable consultar con un médico o dietista antes de incluirla en la dieta de personas con enfermedad celíaca.