En algunas ocasiones, después de cocinar suele suceder que una capa negra queda pegada en el fondo de tu olla o sartén favorita. Limpiar la mancha de quemado no suele ser sencillo y a pesar de que existen muchos detergentes, no llegan a eliminarla por completo.
Sin embargo, existe un truco casero que a pesar de ser poco conocido, que garantiza un 100% de efectividad: se trata de una mezcla que lleva Coca-Cola como ingrediente principal.
El uso secreto de la Coca-Cola que pocos conocen
La Coca-Cola no solo sirve para acompañar comidas o refrescarte, sino que, gracias a su composición, puede actuar como un potente limpiador. El ácido fosfórico presente en la bebida ayuda a desprender restos quemados y manchas difíciles, sin dañar el metal.
Con esta preparación, podrás remover de forma rápida las manchas negras de tu olla y dejarla como nueva, sin recurrir a productos químicos ni a remedios caseros como vinagre o bicarbonato.
Cómo limpiar ollas quemadas con Coca-Cola paso a paso
- Coloca la olla quemada sobre la hornalla.
- Vierte suficiente gaseosa para cubrir la zona quemada.
- Enciende el fuego a temperatura media y deja que hierva unos minutos.
- Apaga el fuego y deja reposar.
- Con una esponja suave, frota el fondo: verás cómo lo negro se desprende fácilmente.
- Lava con detergente como de costumbre.
Si quieres garantizar una mayor limpieza, puedes añadir unas gotas de detergente a la bebida mientras hierve. Esto ayudará a cortar la grasa y dejar el metal aún más brillante.
¿Por qué la gaseosa sirve para limpiar?
La acidez de la bebida actúa sobre la capa carbonizada, ablandándola y haciendo que se desprenda con mayor facilidad. Este truco resulta efectivo en ollas de acero inoxidable, aluminio y en algunos tipos de cacerolas esmaltadas.
No obstante, los expertos en limpieza desaconsejan su uso en utensilios con recubrimiento de teflón, ya que la reacción podría dañar la superficie y afectar su durabilidad.