La exploración del fondo oceánico ha dado un gran salto gracias a la tecnología satelital, permitiendo una comprensión más profunda de las profundidades marinas. Un reciente avance en este campo ha sido la creación de un mapa detallado del fondo marino.
Un equipo de científicos, apoyado por la NASA, utilizó datos del satélite SWOT, especializado en la topografía de océanos y aguas superficiales, para elaborar este mapa. Este esfuerzo es crucial para actividades como la navegación y la instalación de cables submarinos.
Los mapas precisos del fondo marino son vitales para estudiar corrientes y mareas en aguas profundas, que afectan tanto a la vida marina como a procesos geológicos, como la tectónica de placas. Las formaciones submarinas, como montes y colinas abisales, son esenciales para la distribución de calor y nutrientes en el océano, atrayendo diversas especies.
El impresionante descubrimiento que cambia lo que creíamos saber sobre el fondo de mar
Aunque los barcos con sonares han explorado solo alrededor del 25% del fondo marino, los investigadores han comenzado a utilizar datos satelitales para obtener una visión más completa. Las variaciones en la gravedad, causadas por formaciones geológicas, permiten inferir la naturaleza del fondo marino.
El satélite SWOT, resultado de una colaboración entre la NASA y el CNES, puede cubrir el 90% del planeta cada 21 días. Su tecnología avanzada permite detectar diferencias mínimas en la altura del mar, facilitando un mapeo más preciso de las características submarinas.
David Sandwell, geofísico del Instituto Scripps de Oceanografía y su equipo utilizaron un año de datos de SWOT para investigar montes submarinos y márgenes continentales, revelando detalles significativos en el mapa global. Las áreas de menor gravedad corresponden a depresiones en el fondo marino, mientras que las de mayor gravedad indican estructuras elevadas.
A diferencia de satélites anteriores, SWOT puede identificar formaciones más pequeñas, lo que podría aumentar el número conocido de montes submarinos de 44,000 a 100,000. Estas montañas submarinas influyen en las corrientes profundas, concentrando nutrientes y creando ecosistemas en zonas inhóspitas.
Sandwell destacó que la capacidad de SWOT para cartografiar el fondo marino representa un avance significativo en la investigación oceánica. Desde la década de 1990, ha utilizado datos satelitales para este fin y fue parte del equipo que publicó el mapa basado en SWOT en la revista Science en diciembre de 2024.
La información proporcionada por SWOT también ofrece una nueva perspectiva sobre la historia geológica de la Tierra. Yao Yu, oceanógrafo del Instituto Scripps y autor principal del estudio, mencionó que las colinas abisales, que cubren el 70% del fondo oceánico, son difíciles de observar desde el espacio.
Sin embargo, la capacidad de SWOT para detectarlas ha sido sorprendente, revelando el movimiento de las placas tectónicas a lo largo del tiempo y su interacción con las corrientes oceánicas. Esta información fue compartida por Meteored.mx.
Además, se estima que el fondo oceánico alberga alrededor del 90% de la biodiversidad del planeta, lo que resalta la importancia de su exploración para la conservación de especies y la comprensión de los ecosistemas marinos.