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Según la periodista de investigación Anabel Hernández, el expresidente Andrés Manuel López Obrador fue el gran ganador de la reciente elección judicial, al lograr que sus perfiles de confianza llegaran a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
En su podcast Narcosistema, Hernández calificó la votación del 1 de junio como una "farsa cuidadosamente orquestada" para asegurar el control del Poder Judicial.
Los nombres ya estaban definidos
De acuerdo con Hernández, la lista de personas electas coincide exactamente con los nombres promovidos por AMLO:
Yasmín Esquivel
Loreta Ortiz
Lenia Batres
María Estela Ríos
Hugo Aguilar Ortiz, quien además fue designado presidente de la SCJN.
Incluso afirma que en la jornada electoral se repartieron "acordeones" con los nombres que la ciudadanía debía marcar.
¿Un blindaje contra investigaciones?
La periodista sostiene que el expresidente busca protegerse de posibles investigaciones en su contra, tanto en México como en Estados Unidos, por presuntos vínculos con el narcotráfico.
Según sus fuentes, Ismael "El Mayo" Zambada estaría colaborando con autoridades estadounidenses y aportando pruebas que lo relacionarían con López Obrador.
"AMLO está preocupado. Hay testigos y evidencias que ya están en manos de autoridades", afirmó.
Un proyecto que va más allá del sexenio
Para Hernández, esta elección no fue un simple cambio de ministros, sino una jugada transexenal: una estrategia para que el obradorismo continúe dominando instituciones clave.
La clave de esta operación sería Hugo Aguilar Ortiz, hombre cercano a AMLO desde 2006, y ahora figura clave en el nuevo Poder Judicial.
"Como ciudadanos debemos vigilar de cerca a estos nuevos ministros", advirtió.