Los jefes de Estado y de Gobierno del G-7 decidieron ayer no participar más con Rusia en reuniones del formato G-8 hasta que Moscú cambie su rumbo y el clima vuelva a ser el adecuado y confirmaron la suspensión de la cumbre prevista para junio en la ciudad rusa de Sochi.
Nos reuniremos de nuevo en formato G-7 en el mismo momento planeado, en junio de 2014, en Bruselas, para discutir la amplia agenda que tenemos juntos, declararon los líderes de Francia, Reino Unido, Italia, Alemania, EE.UU., Canadá y Japón.
La cumbre del G-7, fue convocada por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, al margen de la Cumbre de Seguridad Nuclear para tratar de adoptar una posición común frente a Rusia tras la anexión por parte de Moscú de la región autónoma ucraniana de Crimea.
Los líderes también reafirmaron su apoyo por la soberanía, integridad territorial e independencia de Ucrania , destacaron que la ley internacional prohibe la adquisición de parte o la totalidad del territorio de otro estado a través de la coacción o la fuerza y subrayaron que tal supuesto viola el sistema internacional.
Tras el anuncio del G-7, el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, afirmó no es un gran problema para su país dejar de pertenecer al G-8, el club que además de a Moscú reúne a Francia, Reino Unido, Italia, Alemania, EE.UU., Canadá y Japón
En otra muestra de que la anexión de Crimea a Rusia ya es un hecho consumado, el presidente interino de Ucrania, Alexandr Turchinov, ordenó ayer el repliegue de todas las unidades de las Fuerzas Armadas ucranianas emplazadas en la península de Crimea.
El Consejo Nacional de Seguridad y Defensa ordenó al Ministerio de Defensa el repliegue de la unidades militares emplazadas en la República Autónoma de Crimea, comunicó Turchinov a los bloques parlamentarios de la Rada Suprema (Parlamento) de Ucrania.
Mientras Kiev anunciaba la retirada de sus tropas de la península, los crimeos daban nuevos pasos para integrarse política, económica y militarmente en Rusia, cuyo gobierno elabora a marchas forzadas una hoja de ruta para aliviar el impacto del ingreso de los nuevos territorios.
La rápida introducción del rublo fue recibida con alivio por los crimeos, que temían por sus ahorros, ya que los bancos habían limitado en las últimas semanas la retirada de fondos a los 500 grivnas (unos 50 dólares).
Los problemas con las cajas registradoras y los cajeros automáticos se arreglarán en una semana, aseguró Axiónov, quien añadió que hoy comenzarán a pagarse ya las pensiones en rublos.
La concesión de la ciudadanía también avanza con inusitada
rapidez, ya que unos 2.500 crimeos ya han recibido pasaporte ruso, según informó hoy el Servicio Federal Migratorio (SFM) de este país.