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Las infusiones de hierbas y tés han sido parte de rituales medicinales y culturales en todo el mundo desde tiempos ancestrales. Entre ellas, el té verde se destaca por su alto contenido de antioxidantes, su capacidad para mejorar la digestión y su efecto positivo sobre el sistema inmunológico.

Dentro de esta amplia familia de bebidas saludables, hay un tipo de té verde que en los últimos años cobró gran protagonismo en cafeterías, dietéticas y redes sociales. Su popularidad no se debe solo a su color vibrante y su versatilidad en la cocina, sino también a su gran valor nutricional, respaldado por numerosos estudios científicos.

¿Cuál es el té verde lleno de antioxidantes?

Se trata del té matcha, un polvo fino de color verde intenso que se obtiene de las hojas del té verde Camellia sinesis. Las plantas de este té deben cubrirse para potenciar su contenido de clorofila y aminoácidos. Luego, las hojas son secadas, desvenadas y molidas hasta formar un polvo que concentra todos sus nutrientes.

Este método de producción hace que el matcha no solo contenga los beneficios del té verde, sino que los multiplique. De hecho, una taza de matcha equivale, en términos antioxidantes, a varias tazas de té verde tradicional.

Propiedades nutricionales del té matcha

Este polvo verde es una fuente rica en catequinas y polifenoles, antioxidantes que combaten el daño celular y reducen la inflamación. También es alto en cafeína, clorofila, y en L-teanina, un aminoácido con efectos calmantes y neuroprotectores.

Además, contiene vitaminas A, C, E, K B2 y B3; minerales como el calcio, hierro, potasio, fósforo, magnesio y zinc. Otro de sus puntos fuertes es su alto contenido de rutina y quercetina, compuestos antioxidantes y antiinflamatorios que potencias la salud cardiovascular y cerebral.

Beneficios del té matcha para la salud

Gracias a su alta concentración de antioxidantes, el matcha contribuye a reducir el daño causado por los radicales libres, ayudando a prevenir enfermedades crónicas como el cáncer, la diabetes tipo 2 y enfermedades neurodegenerativas.

Entre sus beneficios más destacados, se encuentran:

  • Protección del hígado: estudios señalan que el matcha puede ayudar a reducir los niveles de enzimas hepáticas, especialmente en personas con enfermedad del hígado graso no alcohólico.
  • Salud cardiovascular: las catequinas presentes en el matcha ayudan a bajar la presión arterial, reducir el colesterol LDL y prevenir la formación de coágulos.
  • Control del peso: su combinación de cafeína y antioxidantes puede favorecer el metabolismo, la quema de grasas y la regulación de la glucosa.
  • Efectos anticancerígenos: se observó que el consumo regular de catequinas puede contribuir a inhibir el crecimiento de ciertos tipos de cáncer.
  • Propiedades antivirales: algunas investigaciones sugieren que puede ayudar a combatir virus como la influenza.
  • Bienestar mental: la L-teanina, en sinergia con la cafeína, ayuda a mejorar el estado de ánimo, reducir el estrés y aumentar la concentración.
  • Fortalece el sistema inmunológico: gracias a su contenido en vitaminas A, C y E, refuerza las defensas del organismo y combate infecciones.
  • Mejora la salud de la piel: sus compuestos antioxidantes y antiinflamatorios ayudan a mantener una piel sana, reducir el acné y retrasar los signos del envejecimiento.

¿Cómo sumar el té matcha a la dieta?

El matcha es sumamente versátil y puede consumirse de diversas formas. La más tradicional es en forma de té caliente, mezclando el polvo con agua y batiendo con un batidor de bambú hasta que se forme espuma. También puede sumarse en batidos, yogures, jugos verdes, helados, galletas, muffins o pancakes.

Para obtener sus beneficios sin exceder el consumo de cafeína, se recomienda una dosis de 1 a 2 cucharaditas por día, preferentemente por la mañana o antes de hacer ejercicio.