La agencia Standard & Poors decidió ayer elevar en un escalón la calificación crediticia de Grecia, desde la categoría SD (impago selectivo) a la de B-, ante el esfuerzo que realizaron los socios del eurogrupo por mantener el país en la comunidad monetaria. Y decidió dejar su nota con perspectiva estable.

Con esto, S&P terminó por otorgarle a la deuda griega una mejor calificación que a la que actualmente tiene sobre la Argentina, y que actualmente también ubica en B- pero con perspectiva negativa. Esto significa, básicamente, que la agencia encuentra razones para efectuar en el corto y mediano plazo una reducción de la nota argentina que de la griega.

S&P fundamentó el movimiento de la nota de Grecia en la decisión que tomaron la semana pasada los ministros de Finanzas de la eurozona al liberar, tras meses de incertidumbre, u$s 49.100 millones en fondos de emergencia para el país europeo.

Esta misma calificadora había decidido reducir en un escalón la nota argentina en octubre pasado, ante la compleja situación que provocó el fallo judicial en Estados Unidos a favor de los holdouts, aún con desenlace incierto. El tema de Chaco también fue importante y negativo en términos de calificación, pero no totalmente determinante en sí mismo, porque todavía los que tienen deuda bajo legislacion extranjera pueden acceder a las divisas para cancelarla, explicó a este diario, en esos días, el director soberano para Argentina de Standard & Poors, Sebastián Briozzo.