El Banco Central de Turquía subió hoy su principal tasa de interés en 625 puntos básicos, una decisión que impulsó la lira y podría rebajar los temores de los inversores sobre la influencia del presidente Tayyip Erdogan en la política monetaria.
El banco elevó el tipo repo a una semana al 24%, lo que supone que ya incrementó los tipos de interés en 11,25 puntos porcentuales desde finales de abril, en un intento de frenar el desplome de la lira.
La lira perdió un 40% de su valor frente al dólar este año.
La decisión se tomó a pesar de que Erdogan repitió el jueves su oposición a tipos de interés altos, diciendo que la alta inflación era consecuencia de las medidas equivocadas adoptadas por el banco central.
La lira cotizaba a 6,01 frente al dólar tras la decisión, desde más de 6,4176 antes de conocerse el dato.
La divisa perdió un 40% de su valor frente al dólar este año, afectada por las preocupaciones sobre la influencia de Erdogan en la política monetaria y, más recientemente, por una disputa diplomática entre Turquía y Estados Unidos.