En los próximos días, republicanos conservadores de todo Estados Unidos se reunirán en distintas ciudades para tratar de nuclearse en torno a un único candidato para la nominación presidencial y acelerar esfuerzos para detener al relativamente moderado Mitt Romney, ex gobernador de Massachusetts.
Los grupos de la derecha del partido entraron en pánico por las victorias de Romney en Iowa y New Hampshire, los dos primeros estados en los que se han realizado primarias, y ahora están intentando elaborar una estrategia para poner fin a esta racha ganadora, en un momento en que la competencia por la nominación avanza hacia los estados del sur.
En Carolina del Sur, donde se realizarán elecciones primarias el 21 de este mes, los grupos del Tea Party de todo el estado se reunirán el domingo y el lunes próximos en una convención que buscará encolumnar al movimiento detrás de un único candidato. Tanto Newt Gingrich, el ex presidente de la Cámara de Representantes, como Rick Santorum, un ex senador por Pennsylvania —dos candidatos que compiten por el apoyo del Tea Party— hablarán durante la convención.
Aunque, además, aproximadamente 150 dirigentes cristianos conservadores se reunirán hoy en Texas para considerar la misma cuestión del candidato único, las posibilidades de que el movimiento conservador logre hablar con una única voz son escasas.
En general, los conservadores en cuestiones sociales han respaldado a Santorum, quien adoptó una línea dura en temas como el aborto, la contracepción y el matrimonio gay, mientras los conservadores en cuestiones fiscales tienden a apoyar a Gingrich, quien ha puesto agresivamente en la mira el déficit de presupuesto.
Rick Perry, el gobernador de Texas, también tiene cierto atractivo para los cristianos conservadores, mientras Ron Paul, representante por Texas, ha conquistado a los libertarios y al voto independiente.
Joe Dugan, presidente del Myrtle Beach Tea Party de Carolina del Sur, que es seguidor de Gingrich, opinó que la falta de disciplina fiscal de Romney, debe alarmar a los conservadores. “Parecería que vamos hacia el tipo de socialismo fracasado que se ve hoy en Europa. Queremos enviar un mensaje para el resto de los estados, decirles que es hora de que los grupos del Tea Party traten de detener el descenso a la insolvencia de nuestro país”, dijo Dugan.
A los conservadores, también les preocupan los antecedentes de Romney en cuestiones sociales porque ha modificado su posición en temas como el cuidado de la salud, el aborto y el casamiento gay, que son importantes en Carolina del Sur, que es un estado dominado por los cristianos evangélicos.
Richard Viguerie, un derechista al que se denomina el “padre fundador del movimiento conservador” y va a participar del encuentro en Texas, señaló que es “enormemente importante” que el Partido Republicano elija a alguien que no sea Romney como su nominado. “Está en juego el destino del Partido Republicano y del país”, resumió Viguerie, quien respalda a Santorum.
