Gazprom Neft, la tercera petrolera más grande de Rusia, está cobrando en yuanes las ventas de crudo a China, en lo que se convierte en la mayor señal de que las sanciones occidentales han impulsado el uso de la moneda china por parte de las compañías rusas.

Los ejecutivos rusos mencionaron la posibilidad de dejar el dólar estadounidense y adoptar el yuan cuando el Kremlin lanzó una política exterior de "giro hacia Asia" en parte como respuesta a las sanciones occidentales contra Moscú por su intervención en Ucrania. Pero hasta ahora no quedaba muy claro cuánto intercambio comercial se estaba concretando en moneda china.

Gazprom Neft, el brazo petrolero del gigante de gas estatal Gazprom, informó que desde principios de 2015 vende en yuanes todas sus exportaciones de crudo que se entrega a China través del oleoducto Siberia Oriental Océano Pacífico.

Las exportaciones de crudo de las compañías rusas se hicieron mayormente en dólares hasta el verano boreal del año pasado, cuando EE.UU y Europa fijaron sanciones contra el sector energético ruso por la crisis en Ucrania. Esas sanciones restringieron la financiación en dólares y euros para algunas compañías energéticas rusas, incluyendo Gazprom Neft. Si bien las penalidades norteamericanas y europeas expresamente permiten a los clientes seguir pagando a compañías rusas por ventas de petróleo y gas en dólares o euros, las sanciones encendieron una alarma entre los ejecutivos rusos, que ven las medidas como una señal de que Occidente está dispuesto a usar la moneda como arma.

Gazprom Neft respondió más rápido que el resto. Su CEO Alexander Dyukov anunció en abril del año pasado que el 95% de sus clientes habían aceptado firmar los contratos en euros y no en dólares si fuera necesario.

Dyukov más tarde señaló que la compañía había comenzado a vender crudo de exportación en rublos y yuanes, pero no especificó si las ventas eran a una escala significativa. Según datos de Gazprom Neft, el oleoducto Siberia Oriental Océano Pacífico representó el 37,2% de sus exportacciones de 1,6 millones de toneladas en el trimestre finalizado el 31 de marzo.