Starbucks, la cadena de cafeterías más grande en términos de ventas, en China pasó de tener algo menos de 400 locales en 2010 a casi 1.000 hoy; y anunció que el país probablemente el año próximo supere a Canadá como su segundo mayor mercado.
Pero China Central Television, el canal estatal oficial, acusó a la compañía de estafar a los chinos porque les está cobrando el café una tercera parte más que a los norteamericanos. Después de ese informe, dado a conocer el domingo, los diarios locales continuaron las críticas.
Las empresas extranjeras, desde Apple hasta Nestlé, han recibido presiones de los medios estatales y reguladores chinos en los últimos meses para que bajen precios o mejoren el servicio de atención al cliente. Y como China es un mercado cada vez más importante, la mayoría de las compañías rápidamente reaccionan.
No queda claro en el caso de Starbucks si los ataques de los medios surgieron independientemente y desaparecerán con el tiempo, o si podrían ser un preludio de medias oficiales en contra del grupo.
CCTV informó que un café latte mediano cuesta 27 yuanes (u$s 4,43) en China, comparado con 19,98 yuanes en Chicago; 14,6 yuanes en Mumbai y 24,25 en Londres.
También señaló que Starbucks parece tener mayores márgenes de ganancia en China. En el trimestre fiscal finalizado el 30 de junio, Starbucks informó un margen operativo de 36% en Asia, mientras que en América es de 22% y 3% en Europa, Medio Oriente y Africa.
Starbucks respondió que su estrategia de precios se basa en los costos del mercado local, incluyendo inversión en infraestructura, inmuebles y mano de obra. También agregó que su margen en la región Asia-Pacífico abarca 14 países, no sólo China.
