Una discusión aparentemente simple en la red social X se convirtió en viral cuando un usuario cuestionó si las Islas Canarias pertenecen geográficamente a África. La respuesta de un historiador afirmando que "desde hace 25 millones de años" las islas están en África generó miles de reacciones y un intenso debate que puso en evidencia la confusión existente sobre la naturaleza geológica del archipiélago español.
Sin embargo, la ciencia es categórica: las Islas Canarias son islas oceánicas de origen volcánico que nunca han formado parte de ninguna masa continental, incluyendo África. Pertenecen biogeográficamente a la región de Macaronesia, junto con Azores, Madeira, Salvajes y Cabo Verde. La proximidad geográfica a las costas africanas no las convierte en territorio continental.
Origen volcánico de las Islas Canarias: cómo se formaron
Las siete islas principales de Canarias se originaron como volcanes submarinos separados en el fondo del océano Atlántico. Cada monte submarino, construido por la erupción de muchas coladas de lava durante millones de años, acabó convirtiéndose en una isla emergente.
Este proceso de formación es radicalmente diferente al de las islas continentales, que son fragmentos desprendidos de continentes, según explica la geología de las Islas Canarias que figura en Wikipedia.
La cronología de formación sigue un patrón temporal específico: las lavas más antiguas de cada isla disminuyen de este a oeste, con Lanzarote-Fuerteventura (20,2 millones de años), Gran Canaria (14,6 Ma), Tenerife (11,9 Ma), La Gomera (9,4 Ma), La Palma (1,7 Ma) y El Hierro (1,1 Ma).
Esta progresión temporal está relacionada con la teoría del punto caliente mantélico, donde una anomalía térmica fija en el interior de la Tierra genera plumas de magma que emergen hacia la superficie oceánica, como detalla el Instituto Geológico y Minero de España.
Qué es Macaronesia y por qué Canarias pertenece a esta región
Macaronesia es el nombre colectivo de cinco archipiélagos del Atlántico Norte: Azores, Canarias, Cabo Verde, Madeira e islas Salvajes. El término procede del griego (islas benditas o afortunadas) y estas islas comparten origen volcánico y ecosistemas únicos con flora y fauna endémica. Ninguna de estas islas fue parte del continente africano geológicamente, por lo que su biodiversidad llegó a través de dispersión aérea y marítima.
La región macaronésica suma unos 15.000 km² divididos en más de 40 islas y un centenar de islotes, con una población de tres millones de personas y 20.000 especies terrestres diferentes, 6000 de ellas endémicas. Macaronesia alberga la mayor densidad de endemismos del mundo, lo que refuerza su carácter insular oceánico y su diferenciación respecto a cualquier masa continental.
Aunque las Canarias se encuentran dentro de la litosfera africana, se sitúan directamente sobre la corteza oceánica de la placa tectónica, en una zona de transición entre la corteza oceánica atlántica y continental africana.