Elegir plantas de exterior que requieran poco riego es cada vez más esencial. Mientras que todas las plantas necesitan un cuidado inicial para que sus raíces se fortalezcan, algunas especies destacan por su increíble resistencia a la sequía una vez establecidas.
Entre estas, el romero se posiciona como un favorito por su fácil mantenimiento, y también por sus múltiples aplicaciones. Además de ser un aromático básico en la cocina, las hojas de romero ofrecen beneficios significativos para la salud, lo que convierte a esta planta en una opción versátil y valiosa para cualquier jardín o balcón.
Romero: la planta resistente a la sequía que es utilizada en la cocina
El romero, originario de la región mediterránea, es emblemático por su capacidad de adaptación a condiciones secas, lo que lo convierte en una elección ideal para jardines que enfrentan largos períodos sin lluvia. Esta planta no solo sobresale por su resistencia a la falta de agua, también por su versatilidad en diferentes usos, especialmente en la cocina.
El romero se caracteriza por un sabor intenso y aromas que recuerdan al alcanfor, pino, nuez moscada y lavanda, lo que lo hace un condimento favorito para enriquecer el gusto de carnes, pescados poco grasos y ciertas verduras.
Además, es frecuente encontrarlo en combinación con otras hierbas como el tomillo y el laurel, potenciando su sabor en guisos tradicionales y adobos.
Cuáles son los beneficios del romero para la salud
El romero es apreciado por su resistencia y utilidad culinaria, pero sus hojas también son utilizadas por sus múltiples beneficios para la salud, particularmente relacionados con el sistema digestivo. Según el sitio de salud de Mapfre, estos son algunos de los efectos más notables:
- Efecto carminativo: reduce la formación de gases en el tubo digestivo, aliviando las flatulencias y cólicos.
- Facilita la expulsión de la bilis: ayuda a liberar la bilis retenida en la vesícula biliar, favoreciendo la digestión.
- Propiedades diuréticas y antiinflamatorias: similar a la cola de caballo, el romero también posee efectos antiinflamatorios, antiulcerogénicos y antioxidantes.
- Efecto antibactericida y antiséptico: actúa como un fungicida y balsámico, ayudando a prevenir y tratar infecciones.
- Efecto rubefaciente y cicatrizante: aumenta el flujo de sangre en áreas específicas, lo que puede aliviar el dolor en afecciones osteomusculares.