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James Howells, un informático de Newport, Gales, se embarcó hace más de 12 años en una de las "búsquedas del tesoro" más famosas de la historia. En el 2013, Howells descartó un disco duro que contenía entre 7.500 y 8.000 bitcoins y que, según él, quedó enterrado bajo toneladas de basura en un vertedero de Newport. Hoy, más de una década después, su historia ha dado un giro inesperado.
La odisea de Howells comenzó cuando cometió el error de deshacerse del disco duro que contenía las claves privadas de esos bitcoins, generados en 2009, mientras reorganizaba su oficina. En ese entonces, los 8000 activos digitales ya tenían un valor de mercado alto. Sin embargo, la criptomoneda tuvo un importante crecimiento desde entonces y actualmente esa cantidad se encuentra valorada en más de 742 millones de dólares.
La BBC decidió seguir el desarrollo de la historia, que en los últimos días ha comenzado un nuevo episodio. Howells devocó su vida reciente en los metros cuadrados que ocupa el vertedero de Newport, donde cree que podría encontrarse enterrado el tesoro. "Tiene sentido centrar mi energía en esto", aseguró.
La historia del hombre que perdió 700 millones de euros en Bitcoin
Según contó hace unos años a The Guardian, hace más de una década, mientras hacía la limpieza en su casa, confundió unos discos duros y tiró el equivocado. Poco después, al ver cómo subía el precio del Bitcoin, se dio cuenta del error que había cometido. "¿Sabes cuando tiras algo a la basura y piensas 'es una mala idea'? De verdad que me pasó", contó al medio.
A lo largo de estos años, Howells presentó diferentes propuestas para buscar el dinero. En 2022 llegó a plantear una operación de 10,7 millones de euros que se llevaría a cabo con un equipo de especialistas en recuperación de datos, ingenieros medioambientales y maquinaria específica. Su plan incluía el uso de inteligencia artificial, un brazo robótico para tamizar residuos e incluso perros robots.
También ofreció repartir parte del dinero con las autoridades y los ciudadanos de la ciudad de Newport, pero nada funcionó. Las autoridades siempre se negaron a estos proyectos y alegan que los riesgos medioambientales son demasiado altos, que la operación no garantiza resultados y que el coste público, en caso de fracaso, sería inasumible.
Las acciones legales de Howells contra el Gobierno de Gales
En enero de 2025, el Tribunal Superior británico rechazó la demanda de Howells y alegó que no había "posibilidades realistas" de éxito. El informático se representó a sí mismo durante el juicio, y utilizó herramientas de inteligencia artificial para asesorarse y preparar su caso.
Ahora planea llevar el caso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Y mientras tanto, considera otra opción: comprar el vertedero. El ayuntamiento ha anunciado que lo cerrará durante el ejercicio 2025-2026 y prevé reconvertir parte del terreno en un parque solar. Howells sostiene haber hablado con inversores y asegura que tiene apoyo para adquirir la instalación "tal como está".
Dado que el vertedero va a ser cerrado, el informático se ofreció a quitarle un problema al ayuntamiento, haciéndose con él y encargándose de "extraer y reciclar cada pieza, dejándolo vacío". Entretanto, se reunió con inversores de Estados Unidos y Oriente Medio. Un gerente del vertedero les dijo lo que querían saber: "Todo lo que llegó, sigue". La memoria está entre las más de 1,4 toneladas de residuos.
El final de la historia de James Howells
Luego de más de una década en la búsqueda del tesoro, James Howells se rindió y dejará de buscar sus activos digitales. Sin embargo, su historia ahora es más valiosa que nunca: una productora estadounidense ha comprado los derechos exclusivos para convertirla en docuserie, podcast y también en contenidos para las redes sociales.
LEBUL, una productora con sede en Los Ángeles y especializada en relatos multiplataforma se interesó en la historia y adquirió los derechos exclusivos para desarrollar lo que han titulado como: "The Buried Bitcoin: The Real-Life Treasure Hunt of James Howells". El objetivo no es solo contar el pasado, sino también seguir en tiempo real los pasos del protagonista.
Howells se encuentra entusiasmado por esta nueva idea: "Por fin puedo mostrar al mundo exactamente lo que queríamos hacer en el vertedero. Después de ver el documental, la gente entenderá que no es una locura", explicó en entrevista con la BBC.
Por su parte, la presidenta de Unscripted Entertainment en LEBUL, Reese Van Allen, explicó cuál será el enfoque de la serie: "Esto no es solo contenido. Es un thriller tecnológico de acción real con casi mil millones de dólares en juego". La empresa afirmó que el proyecto ya ha despertado el interés de plataformas de streaming, patrocinadores globales y figuras del ecosistema cripto.