En momentos en que los productores rurales y los dirigentes reclaman medidas al Gobierno para frenar la ola de inseguridad que padece el sector, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, presentó un proyecto de ley para endurecer el castigo en los delitos rurales.

La iniciativa, que lleva la firma de Massa y del diputado oficialista Ramiro Gutiérrez, busca "frenar la destrucción del trabajo argentino" incluyendo como vandalismo rural a los daños a cosechas, silos o tolvas y con penas de hasta 5 años de prisión para los autores.

Según el proyecto, el vandalismo rural es un delito no está tipificado en el Código Penal sino como estrago, por lo que la iniciativa busca proteger desde el origen el ciclo producción-exportación de un sector clave de la economía nacional.

"Destruir un silobolsa es destruir el trabajo argentino", remarcó Massa en el proyecto, que además propone penas de hasta 12 años de prisión por liberación de patógenos, tóxicos o energía, emisión de radiaciones, incendio, explosión, inundación, derrumbe, o cualquier otro proceso destructor que puede causar el delito de estrago y que genere un peligro para la vida.

Tras la presentación, desde la dirigencia rural tomaron la iniciativa como oportunismo. Así lo expuso hoy Matías de Velazco, presidente de Carbap, el brazo pampeano de CRA, una de las cuatro entidades nucleadas en la mesa de enlace.

"Yo no sé si estos hechos de vandalismo entran en una ley vigente. El proyecto de Massa me parece oportunismo político", manifestó el dirigente rural en declaraciones a FM La Patriada.

De Velazco dijo no creer que "la rotura de silobolsas sea nada orquestado" y planteó que "pueden ser conductas aisladas".

"No lo veo al Presidente de la Nación mandando a hacer esto", y señaló que "hay gente que seguramente esté en ese espacio político, gente enfervorizada o que ni siquiera milita ahí pero lo hace por hacer hacer daño", indicó y resaltó las reuniones mantenidas por la dirigencia rural con Nación y provincia de Buenos Aires "para bajar los decibeles y que esto no pase a mayores".

Para Velazco, "en este escenario para el productor lo mejor sería vender. El productor vende en pesos, nunca recibe dólares", pero alertó que "el país no tiene la estructura para que se venda toda la cosecha al mismo tiempo",