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Una vez más, lo que ocurra en la economía argentina, en gran medida, dependerá de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Pero también de la evolución de la pandemia, que en las últimas semanas está en su pico de máxima virulencia.
Así, el manejo de las restricciones conforme avance el Covid y el modo en el que se encaminen las conversaciones con el Fondo para que país refinancie la deuda que tiene con el organismo multilateral, determinarán cuánto se expandirá la economía este año, los movimientos más o menos bruscos del tipo de cambio y la velocidad de la inflación.
Trascurrida casi la primera parte del año, la economía se encamina a crecer en torno al 7% -viene de contraerse 9,9% en 2020- y la inflación se ubicaría en la zona del 47%.
Ése es el escenario base que traza un informe de Equilibra, un centro de estudios económicos de reciente lanzamiento, que entre otras variables, asegura que "el contexto internacional jugará a favor de la economía argentina en 2021, tanto por el lado de la demanda mundial como por el lado financiero".
Este escenario inicial parte de la premisa de que la economía continúe trabajando con restricciones por la pandemia, al menos en junio y julio pero que a partir de agosto-septiembre "las restricciones dejarían de ser relevantes para la marcha de la economía". Aquí, el avance del plan de vacunación empieza a mostrar un panorama positivo.
Además, presupone que las negociaciones con el Fondo Monetario por la deuda de u$s 44.000 millones, seguirán transitando el carril de las "conversaciones productivas", buscando alcanzar un acuerdo después de las elecciones.
En el medio se logra evitar el default con el Club de París (u$s 2437 millones) a raíz de la buena voluntad y el compromiso de buscar un entendimiento con le FMI y con el club de países acreedores.
Panorama incierto
En un escenario "optimista", derivado de un acuerdo con el FMI antes de las elecciones, sin default con el Club de París y un levantamiento más rápido de las restricciones por la pandemia, el PBI se expandiría hasta 8%, mientras que la inflación se ubicaría en 45% anual.
Este escenario no tendría tanto efecto sobre 2021 sino que sentaría "bases sólidas" para 2022, considera Equilibra.
Por el contrario, un escenario "pesimista" prevé restricciones hasta la primavera por recrudecimiento de la situación sanitaria, así como mayor necesidad de asistencia a personas y empresas por parte del Estado, "tensionando la estabilidad del mercado cambiaria y las cotizaciones alternativas del dólar".
Además, presupone dificultades en el acuerdo con el Fondo, un default "no controlado" con el Club de París, con caída de la demanda de pesos, "suba de los tipos de cambio y del riesgo país", pronostica el centro de estudios.
En este horizonte, el producto bruto interno se expandiría 5,5%, bastante menos que en el escenario base y la inflación se acercaría al 53%, empujada por una corrección del tipo de cambio después de las elecciones.
Qué es Equilibra
Éste es el primer informe que publica Equilibra, una iniciativa que reúne a economistas con trayectoria y perfil propio, pero que buscan potenciarse y ser una referencia en el mundillo del análisis económico vernáculo.
Martín Rapetti será el director Ejecutivo, mientras que el equipo de economistas estará integrado por Diego Bossio, Lorena Giorgio, Lorenzo Sigaut Gravina y Gabriel Delgado, entre otros.
Se abocarán al seguimiento de la coyuntura, pero también harán análisis estratégico y diseño de políticas públicas, y tendrá un área de investigación económica desde un perfil más vinculado a la formación académica.