En un plenario conjunto de las comisiones de Asuntos Constitucionales, Finanzas y Presupuesto y Hacienda, la Cámara de Diputados debatió este miércoles el alcance del reciente acuerdo económico entre la Argentina y Estados Unidos, que el Gobierno de Javier Milei presentó como un "rescate financiero" de 20 mil millones de dólares, que podría ampliarse aún más.
En ese marco, el bloque de Unión por la Patria defendió el proyecto presentado por Máximo Kirchner para reafirmar las atribuciones exclusivas del Congreso en materia de endeudamiento y exigir que cualquier convenio con potencias extranjeras sea sometido a su aprobación.
El plenario se desarrolló tras el emplazamiento votado la semana pasada en el recinto, con 129 votos a favor, 66 en contra y 4 abstenciones. Durante el encuentro, se firmaron tres dictámenes: el de mayoría, impulsado por el kirchnerismo, con 50 firmas; uno de rechazo, con 19; y un dictamen de minoría de la izquierda, con 2.
El texto de Kirchner reafirma las facultades establecidas en el artículo 75 de la Constitución Nacional, que otorga al Congreso la potestad exclusiva de contraer empréstitos, aprobar tratados y arreglar el pago de la deuda externa.
Además, exige al Poder Ejecutivo y al Banco Central que remitan al Parlamento toda la documentación vinculada al entendimiento con el Tesoro estadounidense. En su artículo tercero, advierte que cualquier acuerdo o crédito que no sea aprobado por ambas cámaras será "nulo de nulidad absoluta e insanable".
Durante el debate, el diputado Itai Hagman fue el encargado de fundamentar la iniciativa en ausencia de Máximo Kirchner. Calificó el vínculo entre Buenos Aires y Washington como "una intervención sin precedentes del Tesoro de los Estados Unidos" y cuestionó que el Gobierno se haya limitado a anunciar los avances del acuerdo a través de voceros extranjeros.
"Hace semanas que la política económica argentina la explican funcionarios de otro país. Lo que se presentó como un salvataje financiero es, en realidad, una cesión de soberanía con objetivos electorales", afirmó Hagman.
El legislador advirtió que "la estabilidad económica de la Argentina depende hoy de lo que diga el presidente de los Estados Unidos en una conferencia o en un tuit" y acusó al Gobierno de haber convertido el rescate en "una operación política orientada a apuntalar la reelección de Milei". En ese sentido, advirtió que, si el Ejecutivo no somete el entendimiento al Congreso, Unión por la Patria lo considerará "nulo".
Desde el oficialismo, la diputada de La Libertad Avanza Cecilia Ibáñez descalificó el debate como "un acto de campaña", mientras que su par del PRO, Germana Figueroa Casas, argumentó que "no se ha violado ninguna norma" porque "no existe todavía un empréstito formal" y que el Ejecutivo "tiene la potestad de conducir las relaciones exteriores".
En tanto, el titular del bloque de UP, Germán Martínez, defendió el dictamen de mayoría y reclamó "reafirmar todos los días el cumplimiento de la Constitución". "¿Alguien puede oponerse a que los acuerdos internacionales que comprometen al país pasen por el Congreso? Nadie es oficialismo para siempre. Las reglas deben ser iguales para todos los gobiernos", advirtió.
El debate en Diputados se produce en paralelo a las gestiones del equipo económico en Washington, encabezadas por el ministro Luis Caputo. El Gobierno busca destrabar un esquema de asistencia que combina un swap de monedas, una recompra de bonos y un eventual crédito directo del Tesoro norteamericano, con el respaldo político de Donald Trump.
El entendimiento, que se presenta como un salvataje para estabilizar el tipo de cambio y fortalecer las reservas, llega en un contexto de alta fragilidad económica, tras varias semanas de intervención del Banco Central en el mercado cambiario y a menos de dos semanas de las elecciones legislativas del 26 de octubre.
Mientras el oficialismo celebra el respaldo de Washington como un gesto de confianza hacia la política económica de Milei, desde la oposición advierten que el acuerdo podría comprometer la autonomía del país y abrir un nuevo capítulo de subordinación financiera.
Las interpretaciones de la "Ley Guzmán"
La llamada "Ley Guzmán" es el nombre informal con el que se conoce a la Ley de Fortalecimiento de la Sostenibilidad de la Deuda Pública, aprobada en 2021 durante la gestión del entonces ministro de Economía Martín Guzmán.
Su objetivo principal fue reforzar el control del Congreso sobre el endeudamiento externo del Estado nacional, luego de las críticas al gobierno de Mauricio Macri por haber contraído el préstamo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en 2018 sin aprobación parlamentaria.
En términos concretos, la ley (N.º 27.612) establece que:
En resumen, la ley buscó institucionalizar la participación del Congreso en decisiones sobre endeudamiento y evitar que futuros gobiernos contrajeran obligaciones externas de gran magnitud sin debate ni control parlamentario.
Durante el debate actual sobre el acuerdo con Estados Unidos, diputados del PRO y de La Libertad Avanza mencionaron la ley como un punto de inflexión: antes de su sanción, el artículo 60 de la Ley de Administración Financiera permitía al Ejecutivo negociar directamente con organismos internacionales sin pasar por el Congreso.
Precisamente, la diputada Figueroa Casas recordó que "el artículo 60 de la Ley de Administración Financiera establece que cuando se trata de endeudamiento con organismos internacionales no es necesario llevar al Congreso esas discusiones, hasta que llegó la Ley Guzmán, que bastantes complicaciones nos ha traído".