Después del exabrupto con el que el gastronómico Luis Barrionuevo cargó ayer duramente contra el ex presidente Néstor Kirchner, desde el Frente para la Victoria salieron a cruzar al titular de la CGT Azul y Blanca, al que llegaron a calificar de “gil” y borracho.

Entre otras cosas, Barrionuevo, que hoy se reúne con su par de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, para seguramente definir la fecha del paro de 24 horas contra el Gobierno nacional, calificó a Kirchner como “un tipo que se robó u$s 6.000 o 7.000 millones y se cagó muriendo a los 60 años. Fue un avaro”.

El repudio medido estuvo en manos del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, en su habitual conferencia de prensa matutina en la Casa Rosada. “Me genera un impacto desde el punto de vista personal porque degrada la memoria de quien además de haber hecho lo que hizo por el país, fue un amigo personal”, respondió cuando le preguntaron por las críticas del gastronómico al ex presidente.

El senador Aníbal Fernández fue menos sutil. “Barrionuevo quiere hacerse el vivo con un muerto. No es de vivo, es de gil. Normalmente tiene actitudes de gil, por lo que no me llama la sorpresa. No es de buena gente”, disparó.

En diálogo con radio América, el ex jefe de Gabinete agregó sobre el sindicalista: “Es un señor sin muchas luces, en vez de vivo es sinvergüenza. Él cree que su condición de sinvergüenza lo habilita a decir estas paparruchadas. Néstor era muy grande para que el pueda hacerle mella. Hasta muerto le pelea con las manos atadas”.

Más allá todavía fue el senador provincial Mario Ishii, el dirigente ultrakirchnerista que en 2009 había prometido “salir a cazar a los traidores” que habían permitido la derrota electoral del ex presidente.

En declaraciones a radio Del Plata, Ishii empezó moderado: “Tendríamos que tomarlo de quien viene y decirle que son frases desafortunadas. Néstor está con Dios. No puede decir eso de alguien a quien no le puede contestar”. Pero siguió con todo. “Hay que ver a qué hora lo dijo Barrionuevo, quizás estaba en pedo”, expresó, antes de manifestar su deseo de que el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, “no siga juntando peludos que van a buscar cadáveres a los cementerios para poder armar un espacio”.